Llegó el momento de la elección, transitamos la última semana de campaña. Se verá si es poco o mucho lo que se puede modificar. El Gobernador salió a quemar las naves en días previos a las Primarias. Desechó la construcción de la Planta Nuclear en el ejido de la capital provincial, adelantó que su localización final deberá contar con licencia social. El oficialismo puso en marcha la maquinaria electoral. La oposición llega con matices muy marcados al tramo final.
La radicación de una Central Nuclear en la zona Atlántica, más que energía, ha generado grandes problemas al Gobierno. El domingo pasado Weretilneck resolvió anunciar que no se emplazará en Viedma. El Vicegobernador, en una charla mano a mano, le aportó el termómetro que le marcaron sus vecinos en las redes sociales. El cipoleño puso sobre la mesa una encuesta con números categóricos. El sondeo expresaba que el 70% de los viedmenses se oponen a la instalación de la Planta, solo el 30 % avalaba la obra. No hallaron margen para más. El lunes recibió a un grupo de funcionarios, escucho argumentaciones a favor, pero sobre todo, en contra. El martes emitió el mensaje para intentar detener el sangrado.
Luego retomó la recorrida incansable, dado que Fabián Gatti no mueve el amperímetro. Varios radicales enrolados en Juntos sostienen que al candidato “no lo mencionan ni los propios ”. Los más veteranos trazan un paralelismo entre el ex jefe de Policía y Hugo “Cacho” Cuevas, delfín de Miguel Saiz en la elección a diputado del año 2005, quien cayó derrotado ante Julio Arriaga por 5 puntos porcentuales en lo que fue el debut del sello Frente para la Victoria en Río Negro.
Pero estas no son las únicas dificultades que se le presentan a JSRN, hay que añadir el factor territorial. La mayoría de sus intendentes no gozan de buenos niveles de aceptación en sus comunidades. Los casos emblemáticos son los de Daniel Fioretti, en Villa Regina; Bruno Pogliano, en El Bolsón; y Gustavo San Román, en Rio Colorado. La poca adhesión a los jefes comunales indica que no hay tracción de votos. Aparte de los referentes locales, la gente solo reconoce al Gobernador, al Presidente y a Cristina Kirchner que, a pesar de no ser candidata en esta tierra, se convirtió en gran electora en Río Negro, como antítesis de Macri que sigue al tope de imagen negativa. Esta circunstancia derramara buena parte de la ponderación de la ex presidenta sobre la postulante del FPV.
Las encuestas propias no le dan bien a JSRN. En algunos lugares directamente le arroja guarismos impensados. Aquel imponente 52% que lo consagrara a esta altura es un grato recuerdo. De acuerdo al interlocutor de turno, brinda datos a cuentagotas: “Estamos levantando día a día”, les dice a los más leales. A varios intendentes les hizo terrorismo, indicándoles que en lo global Gatti se ubica entre 6 y 8 puntos por debajo de María Emilia Soria. Descargó su bronca con Fioretti cuando dijo: “No es el gobierno municipal que hubiésemos esperado para los reginenses”. La perla del Valle fue determinante para la reelección de Weretilneck, dos años después, “tira por la ventana” al artífice de la victoria local más resonante de 2015. Al resto de los alcaldes les corrió frío por la espalda. Entendieron que su líder profesa el pragmatismo como única ideología.
En los barrios comenzó a rodar la maquinaria electoral del oficialismo. La confianza está puesta allí. El largo brazo del Estado llega con subsidios a personas e instituciones, con tickets para materiales de la construcción y asistencia alimentaria. Por citar algunos ejemplos, entre los meses de junio y julio se gestionaron aportes no reintegrables por 60 millones de pesos, 10 veces más que en el mismo período del año anterior. Solo en Cipolletti desembarcaron 10 mil “módulos alimentarios” para ser repartidos antes de los comicios. Buena parte de los recursos se vuelcan en aquella ciudad. Weretilneck necesita una victoria contundente en su casa. De lo contrario, la diferencia que lograría el sorismo en General Roca se convertiría en determinante.
En Bariloche, la locomotora de Juntos ya desplegó toda su fuerza en el Alto. Gennuso colabora en los alrededores del Centro Cívico con su imagen recompuesta. En la capital provincial JSRN había sacado 47 ciento de los votos en 2015, aventajando por 9 puntos a Miguel Pichetto. Ese escenario lo dinamitó la cuestión nuclear. Hoy Odarda asoma con posibilidades. El FPV con su piso histórico aspira a dar pelea. En Regina, San Antonio Oeste y Choele Choel, se vislumbra una luz para Soria. La Región Sur acompañará a Gatti.
Por el lado del Frente para Victoria celebran la coyuntura. El contexto nacional, más la radicación de la Planta Nuclear, puso en carrera a esta fuerza. Muchos atribuyen esta situación a lo fortuito. La pericia estuvo en borrar del tablero al massismo, mientras la diputada se erigía en defensora de las conquistas sociales del Kirchnerismo. La realidad es que el presidente del PJ está recluido en el colchón de votos que aporta el distrito que gobierna. Sabe que si obtiene 30 mil adhesiones en Roca, se traducirán en 8 o 10 puntos de la elección provincial.
Hace más de un mes que Martín Soria no emite opiniones públicas. Trabajó mucho para pegar la figura de Weretilneck a la de Macri. Hecho esto, se apartó para que el protagonismo sea de María Emilia. Nunca hubo plan B. No hay movilización, en muchos lugares ni siquiera se ha repartido la boleta. Dirigentes acostumbrados a gravitar, hoy son meros espectadores. Los que amagaban a cruzar el charco pintándose de verde han decidido esperar. Hay confianza en que los ciudadanos insatisfechos elegirán la lista azul en el cuarto oscuro.
En Cambiemos intentan llegar a la gente con un mensaje positivo. En los hechos, el Gobierno Nacional ha colaborado poco con sus candidatos. A los anuncios de flexibilización laboral, extensión de la edad jubilatoria y alza sostenida del dólar, hay que añadirle, en nuestra región, la llegada a los hogares de la factura del gas con cifras superiores a los mil pesos. Con todo esto a cuestas, Lorena Matzen recorre intensamente la zona andina para terminar su raid en el Alto Valle.
Odarda a esta altura debería vender una franquicia para elecciones intermedias. Una vez más, la senadora intenta dar pelea a los principales partidos. Su sello ambientalista la impuso nuevamente en la escena. Hay ciudades donde luchará por los primeros puestos, en otras, sus probabilidades se diluyen. En pocos días comienza la veda. Los rionegrinos tienen una semana aún para tomar conocimiento de la elección. Ojalá usen ese tiempo para interesarse y decidan hacer valer su opinión sufragando. Solo resta que las urnas se expresen.
23 febrero 2024
Palabra de Domingo