Los concejales Marcela Dodero y Eduardo Cayunao abandonaron este miércoles el Bloque del Frente de Todos. Esta noticia no nos sorprende porque desde hace tiempo votan todos los proyectos presentados por el Intendente y los Concejales de Juntos Somos Rio Negro. En la práctica, son dos Concejales del oficialismo, al servicio del proyecto político de Adrián Casadei.

En democracia, el oficialismo en su condición de ganador de las elecciones, debe conducir el gobierno y la oposición debe acompañar los proyectos que considera beneficiosos para el conjunto del pueblo, pero debe marcar la diferencia cuando observa incumplimientos de las leyes o cuando se pretende implementar políticas que perjudican al conjunto de las mayorías populares.

Los Concejales representan a la comunidad y en ella no todos piensan de la misma manera, por ello no es normal votar todo a favor en las sesiones. El debate legislativo se enriquece cuando hay debate y posturas diferentes. Lo contrario es la mediocridad y la degradación de las instituciones. No es casualidad que jamás en las sesiones o en los medios de comunicación se los ha escuchado diferenciarse del Intendente a Dodero y Cayunao.

La formación del nuevo bloque no tiene ni tendrá el reconocimiento de las autoridades del Partido Justicialista. Sin lugar a dudas, esta decisión, es una clara traición al partido que los seleccionó para integrar la lista del Frente de Todos, pero lo más grave de todo es que traicionaron a los cinco mil ciudadanos que los votaron. De los que traicionan al pueblo, se puede esperar cualquier cosa, no tienen límites.

De ahora en más, estemos atentos a las votaciones en cada una de las sesiones del Concejo Deliberante, porque sus resultados darán mayor credibilidad a lo que estamos diciendo, respecto a la conducta de los disidentes mencionados.

Por todo lo expuesto, es que le solicitamos a Dodero y Cayunao, que tengan un gesto de grandeza y renuncien inmediatamente a las bancas con que el pueblo los honró.