La construcción del oleoducto Vaca Muerta Sur, un proyecto impulsado por YPF que busca conectar la formación de Vaca Muerta con la costa de Río Negro para la exportación de petróleo, dio un nuevo paso con el inicio de su segundo tramo en la Estación de Bombeo Allen. Esta semana, inspectores de la Secretaría de Hidrocarburos de Río Negro supervisaron los preparativos de esta obra que posicionará a la Provincia como un punto estratégico para la exportación de crudo.
El oleoducto, de más de 600 kilómetros de extensión, se desarrolla en dos etapas principales. El primer tramo de 130 kilómetros conecta el área Loma Campana, en Neuquén, con la Estación de Bombeo Allen, y está en fase avanzada de construcción. El segundo tramo, que cubrirá unos 470 kilómetros adicionales, se extenderá desde Allen hasta Punta Colorada, donde se establecerá una terminal portuaria para la salida de petróleo hacia mercados internacionales.
En la barda norte del Alto Valle, equipos de YPF trabajan en la nivelación y preparación del terreno. Amelia Lapuente, ingeniera química de la Secretaría de Hidrocarburos, indicó que “la gente de YPF está preparando el terreno con máquinas viales para poder recibir la cañería, que después será montada hacia la terminal marítima”. Este avance permitirá optimizar la logística para la exportación de crudo, consolidando el flujo desde Neuquén hacia Río Negro.
Con la reciente modificación en la legislación provincial, la Secretaría de Hidrocarburos de Río Negro asumió un rol activo en la fiscalización del proyecto. Inspectores locales ahora supervisan el desarrollo de la obra en conjunto con los técnicos nacionales. “A partir de este proyecto, estamos cambiando el paradigma de la fiscalización en Río Negro, enfocándonos no sólo en la producción de hidrocarburos sino también en su transporte”, afirmó Lapuente. Según explicó, la provincia participa en la revisión de la información técnica y en la supervisión de la instalación de los ductos.
31 octubre 2024
Río Negro