Angélica Riquelme, esposa de Jonathan Caracciolo, el joven asesinado a principios de julio al quedar en medio de una balacera en el barrio 22 de Abril, cuando  iba a comprar pan para su familia, volvió a cuestionar a la ministra de Seguridad, Betiana Minor, por no haberla recibido ayer miércoles luego de marchar por la ciudad en reclamo de Justicia.

“Hicimos la marcha pero no hubo posibilidad de reunirnos con la ministra, nos dejó de nuevo esperando en la puerta. Supuestamente la ministra estaba, el día anterior dijo que ella me iba a recibir, la reunión estaba acordada. Yo no le conozco la cara, esperábamos que si estaba adentro saliera y que la gente viera que me iba a recibir. Después que nos fuimos nos dijeron que la ministra no estaba y que la idea era hacer una videollamada”, indicó la mujer.

Luego de la marcha se conoció que el Ministerio  ofrece un millón de pesos a quien aporte información sobre el hecho. “No sabemos cómo tomar que el Ministerio de Seguridad anuncie una recompensa. Me hubiera recibido antes de hacer el anuncio. Además le íbamos a plantear que se ponga más seguridad en el barrio, que hagan bien su trabajo, el barrio está olvidado, la delincuencia está en el barrio, tanto en el 30 de Marzo, en el Esperanza, el  22 de Abril, Lavalle y Mi Bandera, son tierra de nadie”, afirmó.

Destacó que “los negocios tienen cámaras pero no hay cámaras del Estado”.

La marcha pasó por la jefatura de la Policía y llegó a la Fiscalía. “El fiscal Ortiz está disposición, pero la gente no se anima a dar testimonio. Eso no ayuda al fiscal a que se esclarezca el caso. Hasta el momento no hay aporte de la gente que diga si vieron algo. Mucha gente sale a la noche a comprar, hay gente afuera de su casa”, sostuvo.

En cuanto a lo que pudo haber pasado esa noche dijo que “lo que pasa es que los pibes se pelean entre ellos, se empastillan y empiezan a tirar tiros al aire. Ese día yo estaba cocinando y él estaba en el taller soldando una bicicleta, se escuchaban tiros a lo lejos”.