El domicilio del angustioso hecho se ubica entre las calles Alem y Zatti de la capital provincial y se conoció poco después de las 9 horas.
Los primeros datos recogidos en el lugar del crimen indicaban que el asesinato habría sido cometido a golpes, aunque después trascendió que la mujer (Sandra Minor, docente de 40 años de edad) y el hombre (Jorge Zavaley, de 50 y profesor de Educación Física) murieron producto de heridas hechas con un elemento corto punzante.
El joven tendría problemas de índole psquiátrico y habría sido tratado frecuentemente en el hospital Zatti de Viedma.
Una de las primeras medidas decididas por el magistrado que entiende en la causa fue el interrogatorio al muchacho (Tupac), quien en principio habría señalado que todo se desencadenó al intentar defender a su madre de los ataques de su padre.
Sin embargo, los investigadores no creyeron esa versión, ya que muchas pruebas no coincidirían los los dichos del hijo de las víctimas, quien -después de haber cometido el crimen- habría asistido a la casa de su abuela en Carmen de Patagones, dándole a conocer lo sucedido minutos antes.
Poco más tarde la mujer y el joven llegaron a la casa de la calle Alberdi, donde la primera se encontró con el sangriento cuadro y dio aviso a la policía.
Un vecino comentó que la situación de padecimiento mental de Tupac era motivo de permanente preocupación por parte del matrimonio, pero no se decidía a internarlo en un instituto psiquiátrico.
Las actuaciones del caso están a cargo del juez Guillermo Bustamante, subrogante del juzgado de instrucción penal 2 de Viedma, quien dispuso la realización de la autopsia de los cuerpos y demoró al presunto responsable.
24 noviembre 2024
Judiciales