Por la Fundación participaron del acto su presidente, Gerónimo Piñeiro; el secretario, Juan Leiro Díaz; el tesorero y abogado David Lansky; y por parte del Servicio Penitenciario Provincial, Alejandro Miralles.
En la oportunidad, Lansky destacó que entrega de la personería “es un hecho importantísimo porque es una formalidad que nos permite presentarnos legalmente ante la sociedad y nos habilita a darle cumplimiento al objeto”.
La fundación tendrá la finalidad de “trabajar con todas las personas que están en una situación de vulnerabilidad social”, señaló el tesorero destacando que “el eje principal de trabajo son las personas privadas de su libertad y sus familiares”.
“Tal como lo establece la denominación de la Fundación, se trata de reinsertar socialmente y se busca una herramienta y una contención institucional tendiente a integrarlos nuevamente a la maquinaria social”, explicó.
En este contexto, subrayó la predisposición de colaboración mutua entre el Gobierno y la institución. “La Fundación cree que el Estado no es el único obligado a la hora de ajustar aquellas tuercas necesarias para que todos vivamos un poco mejor, sino que tiene que ser un esfuerzo mancomunado y en esto la fundación resulta una herramienta idónea. Hay una propuesta de ayudar, fiscalizar y hacer sobre todo, a la hora de reinsertar, contener, acompañar a aquellos elementos de la sociedad que por la propia naturaleza del sistema se ven fuera de éste”, añadió Lansky y puntualizó que “el Gobierno ha manifestado su voluntad e interés de acompañar y colaborar”.
Como primer paso, la Fundación desarrollará tareas en la ciudad de Viedma, para luego establecerse en distintos puntos del territorio provincial. En esta Capital “tenemos un complejo penal importante y situaciones sociales que atender, por eso vamos a ir aplicando los primeros programas dentro de la ciudad, ver lo que pasa, analizar los resultados y en razón de eso ver de hacerlo en toda la provincia”, comentó el letrado.
Primer proyecto: una fábrica de pastas
El primer proyecto que la Fundación desarrollará en Viedma está vinculado a brindar herramientas de trabajo a internos que por instituto de la Ley de Ejecución Penal estén próximos a su libertad, con salidas transitorias, semi libertad, libertad condicional, o agotamiento de pena.
La Fundación buscará implementar el primer programa “que tiene que ver con la instalación de una fábrica de pastas cuya mano de obra sean internos y sus familiares. Se va a tratar de llevarlo hacia la institución y se los va a contener con un conjunto de técnicos, psicólogos, asistentes sociales, operadores en psicología social”, comentó Lansky.
Este primer proyecto, de autoría del presidente de la organización, se denomina “necesidades primarias y secundarias” y contempla además de la labor específica en la fábrica, la educación del trabajador en cuanto a la utilización de los recursos obtenidos con su mano de obra, “para que sea lo más beneficioso posible y que sepa cómo volcar el recurso hacia su familia, a la educación, a la contención familiar, de manera que ese esfuerzo institucional que se hace se estire y llegue también a la familia, que se ramifica y tenga un resultado más favorable”.
31 octubre 2024
Viedma