En las fundamentaciones de su pedido Nervi expuso que este sector de trabajadores “tiene varias situaciones de revista de acuerdo a la condición de trabajo. Las mismas surgen de la designación del cargo u horas y de la participación o no en los concursos de ingreso a la docencia”.

Es por ello que se puede estar en condición de suplente, interino y titular. Dentro de la suplencia y el interinato también se encuentran otras situaciones de condicionalidad que se establecen en función de la forma de designación: fuera de listado, fuera de término, con docentes idóneos, o de incompatibilidad.

Opinó Nervi que en estos últimos casos “seguramente poder establecer un carnet de carácter permanente se hace complejo porque puede suceder que el cargo o la hora caigan por no tener la estabilidad estatutaria a fin de año o al comienzo de la nueva asamblea, que cotidianamente se realiza en el mes de febrero de cada año”.

“Sin embargo –dijo- en el caso de los docentes titulares e interinos, como así también los suplentes de cargos jerárquicos u otros, tienen una estabilidad ya establecida que permitiría garantizar el aporte por parte de cada afiliado de manera continua e ininterrumpida”.

El Vocal Gremial expresó que “como se sabe, la renovación anual del carnet  suele ser un trámite engorroso, y a veces esta situación debe hacerse ante una emergencia de salud”.

Considerando que la informatización de los sistemas de legajos docentes y de afiliados a la obra social se puede entrecruzar permanentemente, solicitó

que se tramite ante el Ministerio de Educación y el IPROSS el carnet permanente de los trabajadores de la educación de Río Negro.