Me contaron que era un acto protocolar y que la gente común podía asistir. Por gente común interpreto “cualquier ciudadano sin importar su etnia, status social, creencia religiosa e ideología política”. En otras palabras, el pueblo. Primero pensé en no ir pero en menos de diez segundo decidí hacerlo, para participar porque si no es como que uno siempre está descontento y habla por hablar, sin ver los hechos, y compararlos con la realidad. Y fui como una ciudadana más, porque eso es lo que soy “Una persona común para gente común”. Y mientras caminé hacia al festejo de los 90 años de nuestra residencia de los gobernadores, histórica por cierto. Imaginé que encontraría dicho lugar decorado con cuadros con todos los Gobernadores que han vivido allí y incluso pensé encontrar un cuadro del último Gobernador electo por el pueblo y que iban a pasar algún vídeo sin importar la ideología política de cada uno de ellos.
Para mi sorpresa, al llegar a la Residencia de los Gobernadores me encontré con una pobre exposición de cuadros fotográficos desde sus inicios a la fecha de la vieja casona colonial. Y en su interior colgaban algunas pinturas de flores, paisajes, un poquito de buen arte pero no para dicha ocasión. Eso fue en la entrada, apenas ingresé. Al dirigirme a la sala de recepción me encontré con gente trabajando en los pequeños detalles para el acto, eso suele suceder, es común y advertí que allí tampoco estaban los cuadros con las fotos de los distintos gobernadores.
Al ver la pantalla gigante frente a mí, pensé: “ah van a pasar un vídeo con pequeños mensajes que hicieron historia y entre ellos veremos a los gobernadores”. Pero no. Vimos un video de quienes trabajaron ahí sirviendo a los distintos gobernadores, cumpliendo respectivas funciones, que por cierto es un trabajo muy digno y honrado. Sus anécdotas realmente fueron muy emotivas, algunas graciosas, sus recuerdos hacia los distintos gobernadores fueron muy afectuosos y respetuosos. Se los recordó con ternura, como personas amables hacia sus empleados, pero sin nombres.
Después un grupo de actores representó una pequeña obra de teatro anecdótica, excelente la representación teatral, dos cantantes interpretaron una linda canción y yo seguía esperando el vídeo que sólo a mí se me había pasado por la cabeza. Y en lugar del esperado vídeo; se le ocurre hablar al gobernador de la provincia de Río Negro, que la verdad su bajo nivel intelectual es igual a cero, diría Julio Cortázar y yo afirmo. Porque en un momento de su relato dijo la burrada más grande que oí: “Los gobernadores que han pasado por esta residencia, yo no están, han muerto y entonces no tenemos testimonios vivos de ellos”. Y pensé inmediatamente: ¿Cómo todos muertos? Tenemos ex gobernadores vivos.
Dos minutos después, el mismo Werwtilneck agradecía la presencia a los funcionarios provinciales, municipales, a un ex gobernador que estaba allí y a todos los que estábamos en ese lugar por haber asistido, que por cierto, éramos muy pocos y sobraban sillas.
Al principio estaba feliz, quería ver ese vídeo que había imaginado mi mente porque yo no viví las gestiones de todos los gobernadores de mi provincia. “Yo no sé si mi imaginación es demasiada amplia o quienes me gobiernan hoy y sus funcionarios son muy limitados”. ¡Qué ocurrencia la mía, pensar que podían llegar a elaborar un vídeo valorando la historia!
El tema es que fui al acto por los 90 años de la Residencia, quise ver con mis propios ojos y que nadie me lo contara, porque la gente puede pensar que los medios de comunicaciones exageran un poco. Entonces hay que participar. Y la verdad, no puedo dejar de decir que el acto por los 90 años de la Residencia de los Gobernadores de la Provincia de Río Negro, para mí fue una burrada, una vergüenza. No se puede borrar la historia y al no nombrar a los distintos gobernadores que vivieron allí, es querer borrarla. No hacer un mínimo vídeo con fotos de todos los gobernadores electos, en un acto importante con todo lo que significa a residencia de los gobernadores, es querer borrar nuestra historia. “Y yo no se los voy a permitir bajo ninguna circunstancia”. No pido que me cuenten la trayectoria de todos los gobernadores, ni que me cuenten de que murieron los que ya no están, pero si exijo respeto sin importar las ideologías políticas de cada uno.
En la vida no se puede vivir improvisando. Salí indignada del acto, si me lo hubiesen contado yo hubiese dicho: Qué exagerados… pero lo vi, lo viví y sentí en carne viva que se siente cuando te quieren borrar la historia. Y éste gobierno se sigue burlando de la gente, se sigue burlando del pueblo porque cuando comenzó hablar se dirigió a “los trabajadores y trabajadoras” cuando trabajo es lo que más nos falta a los Rionegrinos.
¿Qué se siente señor gobernador que la gente común no lo quiera saludar y se aleje de Usted? ¿Qué se siente que en un acto tan importante vayan sólo algunos funcionarios y esté ausente el pueblo? Yo vi como la poca gente común que fue, ni siquiera se acercó a saludarlo y algunos funcionarios lo saludaban por compromiso. ¡Qué feo eso! A mí me daría vergüenza, sentí indignación y lloré de tristeza cuando llegué a casa porque no se puede borrar la historia sólo porque no se les ocurrió o se les pasó por alto. Una lástima el acto pudo haber sido mucho mejor, usted tendría que estar viviendo ahí, en la Residencia de los Gobernadores como corresponde. Y decidasé, los ex gobernadores están todos muertos o acepte que quedan algunos vivos porque voy a pensar que ayer Usted saludó y agradeció a un fantasma.
Firma: Roxana Gallego
DNI: 25.402.139
Viedma – Río Negro
25 noviembre 2024
Opinion