Por un lado, se llevó a cabo una gran obra en el Museo para mejorar su seguridad con la instalación de cámaras, reemplazo de pisos, instalación de cielorrasos ignífugos, etc. Cierto es que esta obra mejoró la seguridad, pero a la vez tuvo como consecuencia la baja del servicio de policía adicional. Ello llevó a no poder abrir los días sábados y feriados largos, ya que el único operario de seguridad cumplía con su horario laboral de lunes a viernes.

A esto se suma que en los primeros meses del año no se renovó el contrato de guías, quedando el Museo, a partir de ese momento, sin ese servicio.

Se eliminó de los gastos corrientes del Museo, el rubro Digitalización, con lo cual toda la tarea que se venía desarrollando en este campo con el objeto de preservar el patrimonio documental (Declarado por otro lado Bien Cultural de la Nación) quedó paralizada.

Fue cancelado el rubro Gastos de Conferencias que permitía organizar charlas, coloquios, invitaciones a investigadores de otras ciudades, etc.

El resto de los gastos corrientes que tiene asignado el Museo, como por ejemplo gastos de mantenimiento y conservación (que debe repartirse entre sus tres edificios declarados  cada uno de ellos Monumento Histórico Nacional), no se actualizan desde el año 2014.

Finalmente, el operario de seguridad –Tollo- fue notificado que a partir del 27 de noviembre del corriente finalizaba su relación laboral con el banco, debiendo iniciar sus trámites para la jubilación en ANSES, sin nombrar en su lugar ningún reemplazo.  En este punto el Museo quedó sin poder abrir sus salas de exposición al público por una cuestión de seguridad.

Es decir, tiene un moderno sistema de sensores, cámaras, monitores, etc. pero no hay quien las monitoree, ni quien -al menos- vigile la sala.

Cabe señalar que la seguridad del patrimonio maragato es una responsabilidad exclusiva del Banco provincia, la cual asumió oportunamente.

A todo lo mencionado anteriormente agregaron la intención del traspaso del Museo al Municipio de Patagones por parte de la actual gestión de la entidad bancaria. Consideraron que esta idea, de concretarse, llevaría a un mayor debilitamiento de la función que el Museo brinda a la comunidad local y al turista.

Comentaron que durante este tiempo “hemos solicitado audiencias y concretado reuniones como asociación con el señor Intendente y funcionarios”.