El presidente del bloque de Juntos Somos Río Negro, Alejandro Plamieri, realizó declaraciones en relación a las PASO, donde su fuerza se ubicó en tercer lugar, detrás de Frente para la Victoria y Cambiemos.

El legislador manifestó que "a cada paso que uno daba durante los comicios, se la pasaba escuchando los nombres de Cristina y de Macri. Argentina aún está saldando una pelea pendiente entre los que llegaron para intentar cambiar, y los que no se resignan a irse”.

Luego de aclarar que “obviamente haremos un mea culpa y un análisis de cara a octubre”, consideró como una falta de respeto al electorado analizar los resultados llevándolos a una lectura de ámbito provincial. Esto lo dijo en referencia a la proyección que dichos porcentajes le otorgan al titular del PJ, Martín Soria, de cara a las elecciones provinciales de 2019.

Recordemos que Palmieri decidió evitar la candidatura a Diputado Nacional cuando la inmensa mayoría de los dirigentes de JSRN avalaba su postulación. Esta decisión, con el resultado puesto, deja en un lugar incomodo al titular de la bancada. En el oficialismo se abre una etapa de debate interno para encontrar las verdaderas razones de la debacle electoral.

El titular de la bancada decidió evadir responsabilidades cuando reconoció que “era una patriada instalar una propuesta provincial, absolutamente nueva. Pero creo que la famosa grieta, que es muy profunda y difícil de saldar, nos terminó afectando”.

En las Primarias de ayer, Juntos Somos Río Negro cosechó 66.000 votos. En dos años, a la fuerza provincial, se le fugaron 2 de cada 3 sufragios obtenidos en la elección a gobernador de 2015. Por ahora sus principales dirigentes no reconocen errores propios y le atribuyen a la “grieta” el desgranamiento. La contundencia del electorado obligará a revisar la gestión y la forma de hacer política.