El titular de
la asociación de choferes de taxi de Viedma, Jorge Razzari, confirmó
el aumento del 31% en las tarifas de los taxis en la ciudad. Desde
ayer, 26 de agosto, la bajada de bandera diurna quedó en $1.360, con
un costo de $85 por cada 100 metros recorridos. Durante la noche, la
tarifa asciende a $1.504 con una ficha de $94 cada 100 metros. Según
Razzari, este incremento es necesario para cubrir los crecientes
costos de mantenimiento de los vehículos, aunque la situación
económica dificulta la renovación de los autos, cuyos modelos no
deben superar los 12 años según la normativa vigente.
Uber, Cabify y el
temor a la competencia tecnológica
El avance de
aplicaciones como Uber y Cabify es una preocupación latente para los
taxistas de Viedma. Aunque estas plataformas aún no operan
formalmente en la ciudad, Razzari expresó su inquietud por la
posible llegada de estas empresas que podrían competir de manera
directa con los taxis tradicionales. La existencia de "remises
truchos" ya afecta la recaudación, estimando que circulan
alrededor de 120 vehículos no habilitados que compiten de manera
desleal con los taxis.
Este aumento tarifario y los
desafíos tecnológicos representan un punto crítico para los
taxistas, quienes buscan adaptarse a un panorama cada vez más
complicado, donde la renovación de la flota y la legalidad en la
operación se convierten en temas centrales.
Actualmente,
en Viedma hay 280 licencias de taxis activas, pero la realidad detrás
de estas cifras muestra una problemática compleja. Mientras que
alrededor de 30 choferes trabajan de forma independiente, la mayoría
de los vehículos operan bajo licencias de titulares que suelen
subalquilarlas, una práctica que, aunque ilegal, es frecuente. La
ordenanza establece que, al comprobarse un subalquiler, la licencia
debe caducar, pero muchas veces se esquiva esta normativa utilizando
la figura del "condominio", donde el auto es compartido
entre el dueño de la licencia y el propietario del vehículo.
25 noviembre 2024
Viedma