Por más que corren el foco para la fotografía, las redes muestran la otra cara de los festejos. Evidentemente, el cerco mediático no le da resultado a la patronal, porque aún faltando a la verdad, también queda en falta. En un comunicado oficial del 13 de septiembre anunció que el maestro que recién se inicia cobra 12.342 pesos, sin aclarar que es mucho menos el dinero que llega al bolsillo. El día 28 del mismo mes, el gobierno nacional informó, a través del INDEC, que un “grupo familiar requirió (en agosto) de 12.489,37 pesos para poder adquirir la Canasta Básica Total (CBT) -compuesta por alimentos, indumentaria y servicios básicos- y no ser pobres. A ojo de buen cubero, las dos comunicaciones oficiales confirman, que en Río Negro hay familias docentes por debajo de la línea de pobreza. 

No por casualidad, el ministerio debió bajar raudamente el spot publicitario mentiroso sobre los salarios docentes. Cientos de compañeros y compañeras fueron a exigirles la diferencia. El malestar generado fortaleció la adhesión al paro y el compromiso en las calles. Pero la patronal no escarmentó, antes de llamar a paritarias, optó por luna política de presión y el descuento disciplinador firmado por su vocal más obsecuente. La respuesta de las y los docentes todavía tiene resonancias, más de 3000 reclamos inundaron las coordinaciones zonales y se ocuparon oficinas estratégicas. 

Ahora resuena fuerte el hostigamiento a los equipos directivos, para que denuncien a quienes definieron adherir al plan de lucha. Posiblemente el próximo paso será la amenaza de sumario. Advertimos que ya desistan de volver a intentarlo. A modo de ejemplo le recordamos que el 5 de octubre se cumplió un año en que 25 compañeras integrantes de ETAP de Allen comenzaron sus reclamos por un espacio digno donde trabajar. También en esa oportunidad el Ministerio puso en práctica la intimidación y la persecución, pasaron de la amenaza hasta el sumario disciplinador, hasta que en paritaria, la patronal debió reconocer el verdadero objetivo de esta sanción. Como una señal de madurez podrían evitarse tropezar con la misma piedra. 

Como trabajadores y trabajadoras de la educación no podemos hacer otra cosa que educar, y educamos en cada espacio porque es nuestra esencia. La Ministra Silva sabe, que una buena estrategia de enseñanza es que el estudiante reflexione sobre sus obstáculos y los transforme en aprendizajes. “Enseñaje” decía Enrique Pichon-Rivière. Eso estamos haciendo a través de estas líneas, para los funcionarios que evidentemente necesitan que les refresquen la memoria sobre sus orígenes. 

Es tiempo que la patronal reflexione sobre que le esta pasando: necesita más policías que aplaudidores, sus funcionarios y funcionarias no pueden dar una sola solución efectiva a los problemas de las comunidades. Frente a la opresión la respuesta del conjunto docente es más firmeza y compromiso con el Plan de Lucha. Tiene tiempo hasta que el Congreso de UnTER convocado para el día de la fecha en Viedma, comience a sesionar, sin respuestas concretas, quedará claro que es el gobierno quien definió profundizar el conflicto.