El hecho, llevado adelante por un joven de 18 años, ocurrió en la madrugada del 9 de diciembre pasado en los jardines del Ministerio de Economía, ubicados frente a la costanera viedmense.

Según la acusación, el imputado le propinó una puñalada en el abdomen a la víctima con “intención de provocarle la muerte”, hecho que fue evitado gracias a la intervención de un primo, testigo presencial de la agresión.

Entre la prueba valorada, Puntel destacó las declaraciones testimoniales de más de una decena de testigos, certificados policiales efectuados en el lugar e informes realizados tanto por los responsables del Servicio de seguridad 911 a partir del registro tomado por las cámaras instaladas en la zona, como por la Oficina de Investigación en Telecomunicaciones a partir del análisis de los celulares de los implicados que, entre otros aspectos, ubicaba tanto a víctima como a victimario en el lugar, en el preciso momento en que sucedió el hecho.

El representante del Ministerio Público Fiscal destacó que mediante los relatos brindados en las testimoniales se puede acreditar que la víctima estaba allí con un grupo de amigos, que fue abordada cerca de uno de los carritos de comida estacionados entre ambas manos de la avenida por el grupo en el que se encontraba el agresor y que fue quien ahora está imputado quien lo apuñaló y huyó inmediatamente.

Todo esto se verifica con la intervención del Gabinete de Criminalística, que corroboró la existencia de manchas de sangre en la vía pública que se correspondían con las encontradas en la ropa de la víctima a causa de la herida que, según el informe del Cuerpo Médico Forense, puso en peligro su vida.

Cabe recordar que a partir del 1 de agosto, estos elementos serán los constitutivos de la audiencia de control de acusación, instancia anterior al juicio en el sistema acusatorio que la provincia comenzará a transitar.