El viernes pasado se difundió la entrega de 12 viviendas del Desarrollo Urbanístico elaborado y financiado por el PROCREAR durante la presidencia de Cristina Fernández. Corresponden a un Plan de 46 unidades habitacionales que ya están finalizadas.

Pese a la colorida y concurrida foto difundida por la gestión de Cambiemos, la nota de color la marcó el reclamo, por redes sociales, de las 50 familias que entre titulares y suplentes que aún aguardan una respuesta respecto de cuándo se concretará la entrega de las viviendas restantes.

Otro punto abordado por los usuarios fueron las modificaciones que la actual gestión le imprimió al Programa; ya que una buena parte de las cláusulas ha cambiado. La más importante comprende el valor de las cuotas: antes eran “cuotas fijas” pero ahora son “móviles”.

En un primer momento, desde el Banco Hipotecario sucursal Viedma, se les informó a los preadjudicatarios que los primeros cinco años las cuotas iban a ser ajustables, pero luego les comunicaron que la variación se daría “durante los primeros doce los años”.

Más allá de las decisiones unilaterales la preocupación radica en que la versión extraoficial es que las autoridades estarían evaluando fijar una tarifa en función de la escalada del dólar, cosa que sería de extrema preocupación para los preadjudicatarios ya que la mayoría son empleados públicos.

Con el esquema actual, el valor de cuota aproximado de un departamento de dos habitaciones es de  13.500 pesos. Razón por lo cual, de ser fijado los nuevos importes en función de la moneda extranjera, como en el caso del crédito UVA, sería casi inaccesible para la mayoría de los inscriptos.

La incertidumbre ante la falta de entrega también genera otro problema. Todas las familias preadjudicatarias son inquilinas y en nuestra ciudad las “actualizaciones” de los valores son semestrales, con lo cual, se ven obligados a pagar nuevos aumentos  o en el caso de los vencimientos de contratos negociar una nueva locación.

Por estos motivos ha crecido la preocupación de los preadjudicatarios. Sobre todo debido a la escasa información brindada por el Banco Hipotecario. Desde la sucursal Viedma argumentan que desde Buenos Aires no dan precisiones respecto de la entrega. Cuando se comunican  con la Capital Federal sólo son atendidos por call centers que no tienen más información que la que aparece en internet.

El PROCREAR ya no es un programa en sí mismo. Ahora depende de la Jefatura de Gabinete que conduce Marcos Peña. Sin información precisa más de 50 familias continúan esperando una respuesta a su necesidad habitacional. Mientras tanto se han entregado más sonrisas que viviendas.