Carlos Agasti, consultor del Banco Interamaricano de Desarrollo, informó que se encuentran en Viedma haciendo un proyecto “que va a ayudar a todos los operadores públicos de gestión de residuos sólidos en la región latinoamericana para que puedan autoevaluarse y después puedan identificar planificaciones para la mejora continua del servicio”.

Explicó que se trata de dos consultores ecuatorianos que están “construyendo esta herramienta para la cual se han seleccionado tres ciudades argentinas para realizar el pilotaje y una de esas es Viedma”.

Agregó que “estamos aquí en un ejercicio doble, uno para que Viedma con el conocimiento que tiene y la experiencia al ya tener la infraestructura que fue financiada por el BID pueda ayudarnos a calibrar la herramienta que estamos diseñando para el BID y por otro lado, por supuesto, estamos desarrollando una planificación que la hemos denominado de resultados rápidos para que Viedma en una perspectiva de seis meses pueda ya comenzar a hacer la herramienta e identificar posibles mejoras a su gestión”.

Describió que “más allá de la limpieza, lo que quizás la ciudadanía no puede ver es lo que pasa después de la recolección y después de la limpieza, es decir los residuos que ya llegan a la planta. Hemos podido ver cómo ya no hay un botadero, hay un relleno sanitario técnicamente manejado, aunque hay que hacer mejoras de eficiencia porque no da abasto”.

Por su parte, Álvaro Burgos, también consultor del Banco Interamericano de Desarrollo detalló que la herramienta en la que están trabajando “va a ser fundamental porque es un punto de partida para transformar este sector de residuos sólidos municipales que ha sido desatendido por muchos años y que ahora realmente los municipios están poniendo foco y están preocupados en financiar infraestructura y sobre todo operación y gestión”.

“En general lo que vemos es que las ciudades en donde el BID interviene, realmente logran transformaciones importantes, porque empiezan a contar con infraestructura que otras ciudades no las tienen. Por ejemplo, plantas de tratamiento, de separación, y eso hace que la ciudadanía empiece a tener una conciencia de separar, de clasificar sus residuos. Empiezan a tener rellenos sanitarios, que es el punto más crítico en la gestión de los residuos sólidos, porque es en donde se hace la disposición final y eso si es que no está bien manejado, seguramente es un pasivo ambiental importantísimo en las ciudades”, agregó.

Concluyó que “esta inyección que hace el BID, realmente ayuda para que se transformen las ciudades y empiece a haber ya una economía circular, porque al final el objetivo de todo esto es entrar en este nuevo mundo de la economía circular”. 

Valoró que “Viedma es una ciudad impresionante, una ciudad hermosa, con un paisaje espectacular, la ribera del río y todo el orden que tiene la ciudad es impresionante. Además nos encontramos con una ciudad muy limpia, una ciudad ordenada y eso hace que definitivamente acá sea más fácil operar, que están más avanzada que otras ciudades de Argentina que también hemos visitado en cuanto a la gestión de los residuos sólidos. Entonces, por eso es que Viedma está haciendo este piloto, es una prueba para ver cómo o ir abriendo camino de cómo las otras ciudades tienen que seguir avanzando en esta gestión de residuos sólidos”.