La legisladora del Bloque CC ARI Cambiemos, Roberta Scavo, declaró su preocupación por el momento de extrema incertidumbre que está atravesando el Ente Nacional de Comunicaciones en Río Negro, luego de la resolución del Gobierno de cerrar las delegaciones provinciales.

Scavo se refirió al peligro que representa el cierre del organismo: “La gravedad de esta situación reviste en dos aspectos. Una tiene que ver con los empleados que aquí trabajan que se van a quedar directamente sin empleo. Pero, por otro lado, la situación es muy grave para los usuarios, porque lo que hace el Ente Nacional de Comunicaciones es regular las comunicaciones”, expresó la legisladora.

La parlamentaria, quien presidió la delegación rionegrina durante el Gobierno de Mauricio Macri, se refirió a la función que cumple el organismo actualmente, muchas veces desconocidas por los usuarios: “El ente controla a las empresas de telefonía móvil, a las antenas que utilizan los taxis, los aeropuertos, las radios y su contenido mediático, las compañías de internet. Es el que resguarda y garantiza que el servicio sea bien prestado y de manera adecuada. Además de controlar, por supuesto, las tarifas de estos servicios”.

Por último, planteó las consecuencias que traería el cierre del organismo: “Lo que estamos haciendo con esta medida y con esta decisión es dejando al Estado totalmente ausente y liberando al mercado para que regule por el mismo”.

La legisladora se acercó durante la mañana del miércoles a la delegación del Ente Nacional de Comunicaciones en Viedma, para conocer la situación que están atravesando los empleados del organismo, frente a un panorama de total incertidumbre. “Los trabajadores no fueron notificados, se enteraron directamente por la resolución del gobierno, aún no saben cuál es su situación laboral”, comentó Scavo.

El miércoles 27 de marzo, el Gobierno de Javier Milei sacó una resolución oficializando el cierre definitivo de las delegaciones provinciales del ENACOM. En Río Negro, el organismo está intervenido desde el jueves 28 de marzo con efectivos de la Policía Federal que se encuentran frente a la puerta de la delegación, impidiendo el paso de los empleados y de todo aquel que quiera ingresar. Permitiendo el ingreso solo a dos empleados para proceder con el vaciamiento del Ente.