El gobernador Alberto Weretilneck resolvió impulsar al presidente del bloque oficialista Juntos Somos Río Negro (JSRN), Facundo López, como candidato al Senado de la Nación, una decisión que provocó una inmediata y dura respuesta del vicegobernador Pedro Pesatti, quien aseguró haber sido “vetado por sus ideas”. El episodio dejó al descubierto una crisis política dentro del oficialismo provincial, que ahora enfrenta un nuevo capítulo de tensiones entre sus principales figuras.

La confirmación de que López encabezará la lista de JSRN rumbo a la Cámara Alta reconfigura el escenario político interno. El actual titular de la bancada oficialista en la Legislatura es un dirigente de estrecha confianza del gobernador, con un perfil alineado a las decisiones de la conducción provincial. Su postulación fue definida en un contexto donde el oficialismo busca proyectarse en el plano nacional con una estrategia más moderada y de negociación con el gobierno de Javier Milei.

La reacción del vicegobernador no se hizo esperar. A través de un fuerte mensaje en sus redes sociales, Pedro Pesatti manifestó su rechazo a la decisión y denunció que fue desplazado por motivos ideológicos. “El gobernador Weretilneck me comunicó que tomó la decisión de impulsar una candidatura al Senado con un posicionamiento distinto al mío. No coincido con el diagnóstico del escenario y, en consecuencia, tampoco con la estrategia elegida”, escribió.

Pesatti, quien se había postulado como opción para representar a Río Negro en el Congreso, aseguró que existía un compromiso previo de Weretilneck para apoyar su candidatura. “Puedo entender que el gobernador desestime una candidatura que —en su momento— él mismo propició, pero no puedo dejar de expresar la profunda decepción que esta decisión me provoca”, sostuvo.

En su crítica más contundente, el vicegobernador afirmó haber sido “vetado por sus ideas” y trazó un paralelismo con la historia del federalismo argentino. “Históricamente, quienes mejor representaron los ideales del federalismo fueron relegados y perseguidos. No seré la excepción”, expresó. Y remató: “Como siempre sostuve: los métodos desnudan la verdadera ideología. No hay camiseta que pueda taparla”.

La disputa se trasladó también al plano personal: Laura Sierra, esposa de Pesatti, utilizó sus redes sociales para respaldar al vicegobernador y cuestionar la decisión de Weretilneck. “Una equivocación y un error estratégico que esconde lo peor de la casta”, escribió, en una crítica directa a la lógica interna con la que se resolvió la candidatura.

El mensaje de Pesatti y el de su entorno más cercano evidencian la tensión que atraviesa al oficialismo provincial, en particular entre la presidencia de la Legislatura y la conducción del bloque parlamentario. La decisión de Weretilneck de inclinarse por López no sólo marca el rumbo electoral del partido, sino que también profundiza una interna que ya venía latente.

La disputa entre Pesatti y López —avalada por la decisión del gobernador— no se limita a una diferencia de nombres: revela dos estrategias frente a la política nacional. Mientras el vicegobernador mantuvo una postura crítica hacia el gobierno de Milei y defendió una línea discursiva basada en el federalismo y la autonomía, el oficialismo provincial parece optar por un perfil más pragmático y funcional a los tiempos políticos que atraviesa el país.

La definición del candidato al Senado, lejos de cerrar filas, dejó expuestas diferencias que podrían tener impacto en la cohesión del partido, en el funcionamiento legislativo y en la representación rionegrina en el Congreso. El desenlace de esta interna será clave para el futuro inmediato de JSRN.