A las nueve en punto de la mañana, en el tercer piso de la Justicia Federal los jueces preguntaron a los imputados si iban a hacer uso de la palabra. Tres de ellos quisieron hablar ante los presentes y dar su versión de los hechos acontecidos en marzo de 1976.
El primero en exponer fue Mario Marasco quien estaba al frente de la Escuela de Cadetes en esa época. El policía retirado dijo que desempeño con honor s trabajo al frente de la Escuela de Cadetes. “He honrado este uniforme”, refirió mirando a los jueces y se retiro del estrado.
Otro de los testimonios muy breves fue el de Raúl Pedernera quien hablo sobre la honradez en su carrera y que espera se haga justicia.
Castelli: “Mi sentido común me impide comprender como este juicio se enmarca en delitos de Lesa Humanidad”
Por último, quien tomó la palabra fue Nestor Castelli, ex interventor de la provincia en la época militar dijo que “en la primera audiencia de este juicio he sido sorprendido por una señora con pañuelo blanco, le pregunté a qué correspondía su presencia y nuca más vino”, comentó Castelli en sus primeras palabras ante el jurado.
Luego, refirió que prestaba servicios en Bariloche cuando se hizo cargo de la provincia y que no es verdad que haya llegado a Viedma con cientos de soldados. “El 24 de marzo de 1976 me hice cargo de la provincia, partí con u grupo de personas para tareas de demostración. Nuca lleve la cantidad de hombres que se dijo y no utilice ningún tipo de vehículo militar”, comentó y agregó que al poco tiempo de hacerse cargo le asignaron al Coronel Track, quien fue gravemente herido por un ataque subversivo perdiendo un brazo.
Comentó que cuando llegaron a Viedma delego el mando y que tuvo una cena con el propio Gobernador Mario Franco. “Ahí coordinamos los días que necesitaba para dejar el gobierno, su mujer vino a visitarme y me dejo saludos de su esposo, me obsequió un cachorro de gran danés que no acepte”, expresó.
Remarcó que a Ávalos lo conoció en el juicio negando haber tenido una reunión con él y afirmó que en Viedma dependía del Ministro del interior y que nunca tuvo conocimientos de traslados en avión.
Expresó que al tomar conocimiento de la detención de Lima y Ávalos, realizó todos los trámites poniendo en conocimiento de la detención, “y hablan de clandestinidad”, señaló. Negó haber recibido y mantenido algún tipo de dialogo con el testigo Romera, quien en el juicio argumentó que Castelli a través de una gestión telefónica hizo que le devolviera el auto secuestrado en el mismo procedimiento que se detuvo a Ávalos.
Por último, dijo que “no ordené detención alguna y mi sentido común me impide comprender como este juicio se enmarca en delitos de Lesa Humanidad”, finalizó.
Por último, el jurado antes de dar por finalizada la audiencia dio a conocer la fecha de sentencia que será el jueves 28 de julio a las 12.30 en la localidad de General Roca.