6 octubre 2011 Viedma Comentar

Casi inmediatamente la Justicia llegó al lugar y tomó los datos de las familias que ocuparon los nuevos lotes. Para la asociación civil La Cantora esta nueva toma “es parte de la terrible crisis habitacional que se vive y porque la gente hace lo que puede para solucionar su problema”.

Pablo Casals, integrante de La Cantora, es uno de los vecinos que participó de la primera toma de tierras en el barrio Santa Clara el 15 de enero de 2009. Dijo que esas tierras “están en estado irregular desde el año 1978 a la fecha” porque “ahí hubo una operación fraudulenta para que cuatro o cinco avivados se queden con  esas tierras”.

El referente de la asociación recordó que en su origen la toma fue masiva desde la ruta 1 hasta lo que hoy es Chango Más y participaron unas 350 familias. Después, se decidió liberar los terrenos donde se construyó el supermercado y se mantuvo la ocupación entre Schieroni y ruta 1.

“Son unas 70 familias y unas 50 ya tienen su vivienda de material construida. Muchos ya vivimos ahí”, dijo Casals.

“Hace cerca de un mes y medio, a la Cámara Penal dictó el sobreseimiento para todos los vecinos que ocuparon, pero el tema sigue su curso en la Cámara Civil”, explicó Casals, destacando que todos los que ocuparon “son personas que nos dedicamos a trabajar y a construir nuestra casa”.

En diálogo con FM de la Costa, Casals denunció públicamente que el oficial judicial que encarga de las notificaciones “también te amenaza con venir con el BORA para sacarte” y aseguró que hay “hechos más graves, como por ejemplo que una funcionaria de justicia que acompaña al oficial que notifica invita a los vecinos a hacer negocios turbios”.

Según Casals esta persona “le pide a los vecinos que pasen por su casa para negociar terrenos del barrio 30 de Marzo con el supuesto acuerdo del Municipio, cosa que nosotros intentamos corroborar y sabemos que no es así”.

“Acá hay una gran irregularidad y esta gente cree que el pobre, por el simple hecho de ser pobre, tiene que bancarse las amenazas de los funcionarios judiciales y que nos sobrepasen todos nuestros derechos”, señaló luego.

Agregó que “nosotros tomamos las tierras, nivelamos los terrenos, limpiamos los baldíos y construimos nuestras casas” y dijo que “mucha gente reclamante que dijo ser propietaria de esos terrenos, pero es mentira”.

“Nadie tiene los papeles y los reclamos son una ridiculez de gente que ha estado siempre cercana al poder político en la región, incluso desde la época de la dictadura militar”, dijo.

Finalmente, criticó que algunos medios gráficos de la ciudad “siempre dan la versión de los supuestos dueños y nos hacen parecer como delincuentes”.