Liliana Piccinini: “El municipio es el primero que tiene que ver qué pasa en sus barrios y sus familias”

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La funcionaria convocó a una reunión para esta mañana en la sede de la Defensoría General, a las autoridades del Consejo Provincial de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, Consejo Local de la Niñez, al Ministerio de Familia y la Secretaria de Desarrollo Social del Municipio de Viedma.

Piccinini opinó, antes del encuentro, que “el municipio es el primero que tiene que ver qué pasa en sus barrios y en sus familias”.

Añadió que si el municipio no puede abordar esta problemática, debe acudir a la Provincia, en la que se han creado muchos consejos y entidades para encarar estos temas.

“Estos cuerpos tienen que interactuar entre ellos y ver si tiene creatividad para la ejecución de los programas que generen una solución”, opinó luego. 

Dijo que en casos más graves “cuando los jóvenes transgreden el orden, tienen que entrar al sistema penal y allí estará la Justicia. Se verá luego si es necesario que se los castigue por su conducta o no”.

“Si no se castiga a esto jóvenes no es porque el Estado se desentiende o porque el Poder Judicial no quiere, es porque hay normativas que dicen que no hay que hacerlo”, advirtió.

Dijo que el objetivo es “lograr que todo aquello que no pudo lograr la familia para contener a sus hijos”.

“Cuando un proceso se inicia bien termina bien. Cuando las cosas se desmadran inicialmente tenemos estos resultados, con chicos en la calle que se drogan, están armados y cometen estos delitos”, resaltó Piccinini.

Dijo que durante sus casi 30 años de trabajo en el Poder Judicial “he visto crecer niños en los pasillos de los Tribunales, chicos que después fueron padres y ahora sus hijos también crecen en los pasillos de Tribunales. Ante estas situaciones tenemos que preguntarnos todos en que hemos fallado”.

Aseguró que “la primera pauta que debemos destacar es que cuando se pide a los organismos que se tome alguna determinación esta debe ser ejecutada inmediatamente. Una indicación nuestra no debe ser interpretada como que uno se para en la punta de una loma a dar directivas”.

Admitió luego que “tenemos una juventud y una niñez a la que no le estamos prestando debida atención”, pero aclaró que “no es culpa nuestra, sino de un proceso de política social y económica que viene de otras décadas”.

“Tenemos que garantizar educación. Con docentes que estén bien pagos y tengan ganas de ir a trabajar para inculcar conocimiento. También debemos reforzar las áreas sociales en los barrios y hablar de trabajo”, agregó.

Finalizó indicando que “algunos dicen que estos chicos son consientes de que sus actos están mal, y es posible que así sea, pero no saben medir las consecuencias”.

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