La retención de servicios, cabe recordar, fue determinada ayer tras conocerse la decisión gubernamental de dar fin con gran número de contrataciones, no sólo el centro de salud viedmense, sino en varios de la provincia.
En una asamblea, los profesionales resolvieron dar acompañamiento a los cesanteados, suspendiendo la atención en los consultorios y las prácticas programadas, asegurando únicamente las guardias. Explicaron, por ejemplo, que con estos despidos se afectan seriamente varias prestaciones del Zatti.
La medida se prolongará hasta tanto puedan reunirse con alguna autoridad provincial y se aporten las soluciones al reclamo.
Mientras tanto, los trabajadores realizaron asambleas (ATE en el hall de ingreso y UPCN en el primer piso), las que fueron acompañadas por ex empleados del IPROSS (aquellos que también fueron dejados cesantes).
Los directivos del hospital se comprometieron a justificar en el ministerio de Salud Pública la necesidad de continuar contando con los servicios de las personas despedidas.
No obstante, los trabajadores resolvieron movilizarse hasta la sede de esa cartera para ejercer presión sobre dicho pedido, acompañados por sus compañeros de trabajo de planta permanente.
Paralelamente, los manifestantes repartieron una nota con duros términos contra el senador Miguel Pichetto, quien ayer confirmó que se darán de baja "entre 3.500 y 4.000 contratos" para lograr una reducción de "la superpoblación de empleo público".
La misiva está firmada por trabajadores del hospital y de las áreas e Rentas, Economia, Gobierno, Secretaría General, Producción, Obras y Servicios Públicos, DPA, Desarrollo Social, Educación, IPPV, IPROSS, Turismo e IDEVI.