Desde hace tiempo se sabe que los efectivos de esa unidad hacen lo que pueden con lo poco que tienen. Muchas veces hubo reclamos de vecinos, pero la respuesta es siempre la misma: “No hay recursos, no hay personal, no hay combustible”
Rosana, vecino de las 1016 viviendas, sufrió esta realidad en carne propia. El día sábado quisieron robar su vivienda. Salió a las 10 de la noche y 15 minutos después sus vecinos la llamaron para alertarle que estaban intentado forzar su puerta.
“Llamé a la policía y me dijeron que no hay gente para recorrer el barrio. Yo se que no voy a poder tener un policía cada 15 minutos en la puerta de mi casa, pero queremos más recursos”, dijo a FM de la Costa.
Así, Rosana tomó la decisión de organizar esta marcha de vecinos que partirá desde la esquina de México y Caseros a las 16.30 del viernes. “Será totalmente pacífica y es para pedir más seguridad, más policías y más móviles para la Unidad 34”, explicó.
“Vivimos en una inseguridad en la que ya no se puede salir de la casa o en la que vivimos poniendo rejas, alarmas o pagando seguros”, reflexionó la vecina.
Rosana le pidió a los vecinos “que no tengan miedo” porque “somos gente común pidiendo más seguridad”. Explicó que se marchará hasta la Jefatura de Policía y ahí se presentará un petitorio
“Los barrios dentro de la jurisdicción de la Unidad 34 siempre somos noticia. Porque robaron, asaltaron o apuñalaron a alguien. Somos nosotros, los vecinos, quienes tenemos que salir a la calle a movilizarnos. Es difícil vivir en las 1016 viviendas. Yo vivo hace 20 años en el barrio, pero esta cada vez peor”, dijo.
Aseguró además que la droga “está ‘a flor de piel’ en el barrio, porque uno sale a la calle y ve a los chicos chiquitos drogarse como si comieran un caramelo”.
"Solo dos personas"
Casi de inmediato una vecina del barrio 20 de Junio salió a ratificar los dichos de Rosana. "Yo también sufrí lo mismo. El miércoles a la noche quisieron entrar a mi casa, nosotros nos levantamos y lo evitamos”, comentó a FM de la Costa.
La vecina se comunicó con la Comisaría 34 para explicar lo que había ocurrido y la respuesta fue indignante: “Yo le pido disculpas señora, pero solamente tenemos dos personas para todo el barrio”, dijo el efectivo que atendió el teléfono, casi con vergüenza.
“Yo me quedé sentada toda la noche en la ventana vigilando. No vi pasar a un solo policía y vivo frente a la Comisaría”, dijo la vecina, quien prometió participar de la marcha organizada para el viernes.
“Tenemos que hacer que el jefe de la Policía nos escuche. No saben lo que es vivir con este temor. Es estar esperando todo el tiempo que alguien venga y quiera robarnos”, finalizó.
29 noviembre 2024
Viedma