Esas notas, sin embargo -y según la palabra de los empleados- poseían fechas erróneas, lo que incrementó las críticas a las autoridades comunales.
Élida Carillo, dirigente de UPCN, adelantó que dichas misivas serán elevadas a la Secretaría de Trabajo de la provincia, a fin de que ese organismo tome cartas en el asunto. “Es una desprolijidad terrible”, dijo y señaló que es “un trabajo psicológico” del Municipio.
Por otra parte, Carrillo indicó que los trabajadores descreen la existencia de amenazas de muerte al intendente y funcionarios. Consideran que se trata de un artilugio para “victimizarse”.
“Este es un reclamo legítimo. No vamos a claudicar por estas cuestiones ni nos vamos a hacernos responsables de todas estas cosas. Son inventos”, remarcó.
“La mirada del Ejecutivo hoy es no dar respuestas a la gente”, dijo finalmente la gremialista.
23 diciembre 2024
Viedma