“La toma es una extorsión, porque los dirigentes han dicho que se retirarán cuando reciban una oferta.  ¿Cuál es el siguiente paso? ¿Retener a un funcionario en su oficina y negociarlo por el 15% de aumento?”, señaló Cardella a FM DE LA COSTA.

Aseguró que la toma del edificio, que lleva más de 24 horas, no es una medida pacífica porque “hay un núcleo duro de cobardes que lo único que hace es insultar a las mujeres trabajadores”.

“La semana pasada la propuesta de los dirigentes fue del 60%. Se demostró en números que eso sobrepasa el presupuesto municipal. Es una propuesta irracional. En las asambleas los dirigentes encuentran un canto de sirenas. Hay una irracional, ilegal e ilegitima toma de un edificio municipal”, dijo.

Cardella remarcó que “tácticamente y estratégicamente se dirigieron a la sede del Poder Ejecutivo” para iniciar la protesta señalando que cuando se reunieron con los concejales “no plantearon nada”.

“La toma de un edificio en un punto neurálgico no es una cuestión ingenua. Ellos saben lo que hacen”, aseguró el secretario quien ayer se determinó que los empleados que se desempeñan en ese edificio no concurran a trabajar, mientras que los funcionarios se trasladaron a la sede de calle San Martín “para no exponerlos al maltrato, el insulto y la presión”.

Del mismo modo, el funcionario defendió el aumento salarial otorgado por el Municipio, señalando que “le dimos un aumento del 26%, que es uno de los más altos que ha habido en todos los municipios de Río Negro y muchos del país y ni compararlo con los sectores privados que reclaman por un 24 o 20%”.

“Esta toma lo que busca es una extorsión. Si yo a una persona le retengo algo para que haga algo es una extorsión”, reflexionó.

Dijo que “el derecho de huelga se respeta” pero “tomar un edificio público no es algo legal ni legitimo. El concepto que nosotros tenemos de la dirigencia gremial es aquellos que se sientan a charlar, que son insistentes, persistentes, buscan alternativas y hacen propuestas”.

Contra Ferreira

Cardella no dudo al señalar que existe “un núcleo duro totalmente contrario a la administración municipal y que busca el desprestigio de la figura del intendente, del gobierno radical de la ciudad y trata de desestabilizar”.

Dijo que “hay datos” que avalan esta situación como “las declaraciones del legislador Vargas y la actuación ‘express’ de la Secretaría de Trabajo que yo no he visto que lo soliciten a (Omar) Goyé o a (Martín) Soria en 24 horas como con nosotros”.

“Hay una estrategia que tiene una sola política dirigida: desprestigiar a Jorge Ferreira”, dijo Cardella, señalando que esta impulsada “por los gremios involucrando a la Secretaría de Trabajo y al legislador Vargas”.

Además, aseguró que “desde el bloque de concejales del FPV reconocieron que uno de los funcionarios asistió con viandas a la toma” y eso “es una apoyatura clara para que hagan fuego y cortan la calle”.

Dijo que esto “es llamativo, especialmente de SOYEM, que tiene una fuerte vinculación con el Frente para la Victoria” y continuó: “Cortan la calle y piden que levanten el corte a una cuadra de Casa de Gobierno; además los dirigentes le avisaron antes por escrito a la policía que iban a hacer una toma del edificio. Es llamativo”.

Posibilidad de negociación

Sobre la posibilidad de retomar las negociaciones, Cardella dijo que “el espacio para negociar estaba, pero hay que sentarse conversar, ver partidas y presupuestos. Hay que ver cuales son los empleados que merecen algún tipo de mejoramiento en este momento”.

“Ya tuvieron la prensa y la sociedad tomó más conocimiento de esto. Se tienen que retirar para que el resto trabaje tranquilamente. Es una cuestión de respeto hacia los terceros y hacia los bienes que son públicos y hay que cuidarlos”.