24 agosto 2012
Viedma
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En un documento difundido esta tarde, los ediles expresaron que “la estrategia fue crear un discurso en el que se habló de traición y oportunismo, intentando manchar nuestra imagen como representantes de los vecinos, opacar nuestro derecho a disentir, cuestionar nuestra legitimidad y sacar del foco el verdadero problema que es solucionar la penosa situación salarial de muchos trabajadores de la Municipalidad”.
También mencionaron que “como producto de esta intolerancia hemos sufrido pintadas de paredones, mensajes de textos con frases sugerentes, llamadas, comunicados de grupos de legitimidad dudosa y hasta la publicación de artículos descalificadores de nuestro rol y posición”.
Frente a esto dijeron que “a la ciudadanía que nosotros no acordamos con esta forma de hacer política porque priorizamos el diálogo frente al espíritu expulsivo, la tolerancia frente a la agresión y la discusión frente a los comunicados arbitrarios y sesgados. La política es lo opuesto a la violencia y desde ahí planteamos el debate. Estamos seguros de eso”.
Se mostraron tranquilos “porque tenemos el respaldo que necesitamos. El de la gente, que nos votó para este cargo, y el de las máximas autoridades partidarias, que aún siendo de líneas internas opuestas coincidieron en apoyarnos como concejales radicales que somos. Seguiremos trabajando para honrar este lugar, pese a quien le pese”.
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Viedma