La situación se torna casi insostenible, pero no solamente en Viedma. En Centenario, por ejemplo, los empleados del sector decidieron cortar los puentes carreteros de la zona, medida similar a la que ya habían tomado sus pares de la capital provincial.

En todos los casos, los trabajadores reclaman por los perjuicios que generó la decisión, casi espontánea, de correr la barrera sanitaria.

Arturo Carrasco, titular de la MUTRACAVI y referente del sindicato de la carne de Viedma, señaló a FM DE LA COSTA que FRIDEVI “está en el mismo tono que al momento del corrimiento” y se mostró preocupado porque “sigue siendo menor la cantidad de faena y se mantiene la expectativa de que en algún momento van a echar gente”.

En ese sentido, señaló que el gobierno “se comprometió a aportar subsidios a la empresa para el pago de los sueldos, pero esta situación no se puede estirar en el tiempo”.

“La gente ve que una empresa privada recibe subsidios y seguramente no le gusta. Pero el otro día veía en el diario que a los productores les daban 14 millones, les llevan el agua, les pagan todo. Tiene la vaca atada estos señores”, cuestionó.

Confirmó que la empresa puso a disposición el retiro voluntario pero “se ofrece un incentivo económico que no es muy grande”. No obstante eso, el frigorífico llegó a un acuerdo con 17 trabajadores, “aunque necesita desprenderse de unos 60 trabajadores”, según Carrasco.

“Seguramente FRIDEVI va a tomar alguna decisión para equilibrar sus cuentas y los perjudicados seremos los trabajadores”, señaló y explicó que el traslado de personal a Bahía Blanca que se estudiaba tiempo atrás quedó descartado. “Es muy caro, porque esta gente iría bajo la tutela de la empresa y les tienen que pagar el alojamiento”, dijo.

Carrasco aseguró que el gremio mantiene el diálogo con la empresa, tratando de arribar a un acuerdo, pero aclaró que “las alternativas se van cerrando, la decisión la tiene el gobierno y la única solución sería abrir un corredor para la exportación”.