El caso fue presentado hace mucho tiempo por los hermanos Speciale, quienes explicaron que todo comenzó con la muerte de su padre. En ese momento, se presentan en el área de Tierras de la provincia para hacer posesión de las tierras que les correspondían, pero no pudieron hacerlo.

“Mi padre se crió en esa chacra qu está pegada al hipódromo. Falleció en el 2006 y automáticamente alguien puso gente en la vivienda diciendo que ellos habían comprado esa tierra y que no nos correspondía nada. Mi padre estuvo enfermo un tiempo y después falleció. Mientras estaba enfermo, esa gente ya se había metido en las tierras”, dijo José María Speciale, uno de los hermanos que hizo la denuncia, a FM DE LA COSTA.

El joven explicó que una persona (identificada en su momento como Fabián Cáceres) dijo haber comprado esas tierras a su padre, pero nunca lo pudo comprobar. “Apareció en la Dirección de Tierras con unos papeles que nunca se los reconocieron; pero lo más llamativo es que después un grupo de abogados y otras personas compraron esas tierras y uno de ellos es un pariente mío que tiene la chacra de al lado”.

“Había una documentación apócrifa que los técnicos de la Dirección de Tierras nunca lo reconocieron y nunca apareció un pago de nada. Lo único que se podía vender ahí era la casa, porque las tierras son fiscales”, sostuvo Speciale.

Explicó, incluso, que la casa de la chacra está actualmente ocupada por un efectivo policial, de apellido Castro, que “está ahí para amedrentar con el arma”.

Ratificó que en el grupo de abogados y ex funcionarios estaba el hoy fiscal general Marcelo Álvarez y otras personas que prefirió no nombrar, pero aclaró que están todas identificadas en el expediente que es de acceso público.

“Este policía que está en la casa dice que Álvarez lo puso ahí. Y varias veces cuando fuimos a hablar nos sacó el arma. Una vez fuimos con Diego Candia y nos pasó eso también”, explicó.

Justamente fue Diego Candia, titular de la asociación La Cantora, quien los acompañó ante la Comisión Investigadora de Tierras de la Legislatura. “Nos abrieron las puertas y nos escucharon”, dijo.

Después de un año, Speciale recibió ayer la notificación del dictamen favorable y recordó que ya tenían un dictamen, también favorable, de la Fiscalía de Estado.

“Nosotros reclamábamos la casa y 10 hectáreas que mi padre había dejado en vida. Con el tiempo se va a poder hacer el título de propiedad. Teníamos razón y sabíamos que nos correspondía”, concluyo Speciale.