El hecho se produjo en mayo del año pasado, cuando al entidad crediticia dejó sin trabajo a una mujer que llevaba más de dos décadas allí, acusándola de haber violado el secreto bancario. Aseguran que habría dado a conocer detalles de la cuenta mediante la que se abonan los gastos de representación de los legisladores.

Estos fondos se hacían efectivos a través de simples cheques, de abultadas cifras, que determinadas personas del Poder Legislativo iban a cobrar mensualmente. Esta situación fue dada a conocer en ese momento por el diario Noticias de la Costa.

Tras esta divulgación el banco decidió despedir a una trabajadora, quien planteó su situación en el gremio del sector (La Bancaria). Su titular local, Rodolfo Cufré (quien ahora es Secretario Legislativo de la Cámara de Diputados de la Provincia) dijo tras el suceso que “el banco tendrá que acreditar la legalidad del despido por vía administrativa o judicial” y mencionó que “la política tiene que tratar de favorecer la reincorporación de esta compañera”.

“Yo no voy a dar nombres, pero cada uno sabe la responsabilidad que le cabe. Hay gente que ha tomado esta información y sin escrúpulos la ha dado a publicidad o ha hecho uso de esta información sin pensar en las represalias del banco”, cuestionó.

La decisión judicial

Esta mañana el abogado Diego Sachetti dio a conocer en FM DE LA COSTA que la Cámara Laboral falló a favor de la ex empleada bancaria Sandra Entraigas porque “el banco no tenía ninguna manera de justificar la medida”.

Agregó que el despido estuvo basado “en una supuesta información que otro empleado brindó y que, en teoría, venía de Entraigas, cosa que después se demostró en el juicio que no era cierto”.

Sostuvo que en el lugar donde se guardaba esa información “tenía libre acceso cualquier persona, no solamente empleados del banco, sino también de seguridad y limpieza, que son de otras empresas”.

Remarcó Sachetti que dicho sitio no poseía cámaras de seguridad. Ahora tampoco las tiene, pero tras el hecho quienes deseen ingresar deben pedir una llave.

“El Banco no pudo acreditar de ninguna manera lo que decía, entonces tuvo que pagar el despido como si fuera uno sin causa. De todas maneras esta es una sentencia de la Cámara Laboral que puede ser recurrida por el banco. No está aún terminada”, subrayó.

Detalló que además del despido reclamaron daño moral, pero se decidió que no correspondía “ya que quedaba suficientemente resguardado el daño en los distintos rubros de la indemnización. De alguna manera la sentencia también sirve de desagravio de lo que se publicó en su momento”.

Los cheques

De acuerdo a la información a la que accedió el diario Noticias, el 3 de febrero de 2012 se habrían presentado cuatro cheques: Nº 22675819 por 77 mil pesos; Nº 22675813 por 66.990 pesos; Nº 22675807 por 48.510 y el 22675820 por 177.800 pesos, lo que hace un total para ese día de 370.300 pesos.
La sucesión de presentaciones se dio el 29 de febrero y la continuidad el 1 de marzo y ya las cifras cambiaron. El último día de febrero fueron tres cheques: Nº 22675902 por 187.600 pesos; Nº 22675890 por 118.188 pesos y 22675896 por 163.212, lo que da un total de 469.000 pesos. Al día siguiente, 1 de marzo, se presentaron tres cheques: Nº 22675889 por 48.510; Nº 22675901 por 77.000 y 22675895 por 66.990, lo que arroja la cantidad de 192.500 pesos.
También en marzo, pero a fin de mes, el 29, ya fueron nueve los valores presentados en la caja del Banco Patagonia por un valor de 708.500 pesos. En este caso fueron los cheques Nº 5.975 por 48.510 pesos; 7.181 por 66.990 pesos; Nº 7.187 por 77.000 pesos: Nº 7.180 por 11.844 pesos; Nº 7.186 por 16.356 pesos; Nº 7.192 por 18.800 pesos; Nº 7.176 por 118.188; Nº 7.182 por 163.212 pesos y Nº 7.188 por 187.600 pesos.
Los cheques de referencia están firmados por Gladys Riera y Leandro Gómez.