Agregaron que "teniendo en cuenta que en la mayoría de los casos se trata de medidas de aplicabilidad futura, habrá que evaluar el verdadero impacto de las mismas. Un 15 por ciento de reducción salarial a la planta política y el cese en sus funciones del 50 por ciento de los cargos no supone, a primera vista, que altere demasiado el presupuesto en favor de gastos de otra índole".

Por otro lado, mencionaron que "el Estado deje de afrontar el gasto por alquiler de la vivienda del Gobernador es una medida que debe hacerse extensiva o debe ser imitada por el resto de los funcionarios".

Desde ATE se destaca que para que realmente estas medidas se transformen en una política de Gobierno destinada al mejoramiento de la calidad y eficiencia de los servicios públicos, las mismas deben ser acompañadas por un aumento salarial real a todos los trabajadores y por mayores asignaciones presupuestarias para hospitales, escuelas y programas sociales.

"Las medidas anunciadas por el Gobernador, si bien no tendrán un gran impacto presupuestario, se transforman en una respuesta parcial a los reclamos de todos los estatales y de nuestro sindicato", reconoció Rodolfo Aguiar, Secretario General de ATE Río Negro y concluyó: "Mas allá del impacto real, que habrá que analizar los próximos meses, no podemos dejar de reconocer que estamos ante una fuerte señal política. Pero una señal política que deberá ser acompañada por un justo aumento salarial a todos los empleados públicos y por mayores asignaciones presupuestarias para servicios, si lo que se quiere es realmente beneficiar al pueblo rionegrino".