La medida de fuerza sostenida por el cuerpo de delegados gremiales será permanente y sólo se evaluará su suspensión ante respuestas concretas del Poder Ejecutivo Local a los principales reclamos que se llevan adelante.

Los trabajadores municipales reclaman un aumento salarial digno y sostienen la insuficiencia del último incremento otorgado a los empleados, ya que se ubica varios puntos por debajo de la inflación, generando una grave pérdida en el poder adquisitivo de los empleados de todas las categorías. 
Durante los últimos años, sólo se han determinado, con la complicidad de otras entidades gremiales, aumentos que benefician a los funcionarios políticos de la comuna y que perjudican a los trabajadores que tienen muchos años de servicio.

Por otro lado, los estatales señalan que las condiciones laborales se han ido agravando progresivamente y que ya, no sólo se pone en riesgo la salud de los trabajadores, sino también a todos los vecinos de la localidad.

Falta de indumentaria, áreas municipales sin sanitarios, dependencias con peligro de derrumbe y un parque automotor absolutamente deteriorado tornan imposible la prestación de los principales servicios que debiera garantizar la Municipalidad.

"Desde que asumió la nueva gestión, sólo ha mostrado preocupación ‎por aumentarse sus ingresos y estamos ante los funcionarios municipales mejores pagos de toda la provincia. Sin dudas que el Intendente y su equipo quieren utilizar los recursos que son de todos para enriquecerse en cuatro años de gestión y nada les preocupa las necesidades de los trabajadores y vecinos de la comunidad", cuestionó Rodolfo Aguiar, Secretario General de ATE Río Negro y agregó: "Tenemos que seguir exigiendo un cambio de rumbo al Poder Ejecutivo Local. El Estado debe servir para mejorar las condiciones de vida de los ciudadanos ‎y no para que de él se sirvan los políticos".