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Como Estado no podemos estar ajenos, es por ello que este Consejo valora y acompaña incondicionalmente a los Trabajadores y Funcionarios del área de Protección Integral, del Ministerio de Desarrollo Social, que han cumplido con los deberes de funcionarios públicos al denunciar las acciones cometidas contra niñas de la localidad de Viedma.
Presidenta y consejeras/os del CONIAR, manifestamos nuestra disposición ante quien lo requiera, confiamos en la instancia judicial en la que se encuentra la causa y esperamos el pronto esclarecimiento de esta violenta vulneración de derechos ejercida, presumiblemente, por sectores de una comunidad y de un estado que deberá, si así fue, hacerse cargo de las consecuencias que correspondan.
Cuando una sociedad permite que niños y niñas vivan en la calle, padezcan hambre, sufran enfermedades de transmisión sexual, sean vendidos sexualmente y se droguen a toda hora, estamos frente a una comunidad que ha perdido la sensibilidad y la vergüenza. Afortunadamente, esta no parece ser nuestra sociedad indiferente, o al menos gran parte de ella es sensible y está dispuesta a dar la lucha que haya que dar.
Como Estado, no debemos asumir un papel beligerante. Debemos combatir las causas de las víctimas y a aquellos agentes que coadyuvan para que haya niños (as) y mujeres que se prostituyan. Esa es la tarea que día a día realizan mujeres y hombres de todas las procedencias. En eso estamos, aunemos esfuerzos, luchemos por nuestras niñas, niños y adolescentes para que tengan un presente y un futuro mejor.
1 mayo 2024
Viedma