El Ministerio de Seguridad y Justicia cuenta con un programa de prevención social del delito y las violencias que se nutre de las más exitosas experiencias a nivel provincial, nacional e internacional en esta materia.

El Programa, denominado “Oportunidades desde el barrio” se instaló en más de 15 barrios de la provincia de altos niveles de conflictividad social, permitiendo reducir los índices de violencia, ofreciendo a los jóvenes oportunidades alternativas al delito.

Esta es una experiencia similar a la que ya se había implementado hace algunos años y abandonado posteriormente, cuando la titular del área de Seguridad y Justicia era Martha Arriola, quien implementó programas barriales de contención, como el Programa de Integración Comunitaria (PIC), desde un área casi extinta hoy en el Ministerio que conduce Gastón Pérez Estevan, como la Dirección de Participación Comunitaria.

Esta nueva iniciativa –que ya cumple un año de implementación- incluye la realización de talleres para la inclusión sociolaboral, socioeducativa, además de actividades recreativas, deportivas y la contención social dirigidos a más de 240 jóvenes en toda la provincia.

En este sentido, la titular de la subsecretaría de Políticas Criminal, Lucía Camardón, explicó que “el programa ha dado muy buenos resultados, estamos llegando a más de 240 jóvenes pertenecientes a cuatro de las localidades de la provincia con mayores índices delictivos, ofreciéndoles oportunidades de inserción sociolaboral, socioeducativa, de trabajo en las relaciones interpersonales, intrafamiliares;  y herramientas de contención”.

Concibiendo al delito y la violencia como una problemática compleja que no puede abordarse desde una sola área del Estado, las intervenciones se realizan bajo la coordinación de la Subsecretaría de Política Criminal del Ministerio de Seguridad y Justicia pero son posibles gracias al trabajo en conjunto con otros organismos provinciales, municipales y nacionales, así como con organizaciones de la sociedad civil.

Este programa permite a la provincia aportar al cumplimiento con los Objetivos de Desarrollo Sostenible fijados por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para garantizar la paz, la justicia, reducir las desigualdades y la violencia.

La iniciativa se enmarca en el plan integral de prevención del delito entendiendo la prevención y la generación de oportunidades como la más eficaz forma de evitar situaciones delictivas y de violencia.

Entre las actividades realizadas por los jóvenes se incluyen manipulación de alimentos, gastronomía, electricidad, eco-construcción, construcción en seco, herrería, mantenimiento general, panificación,  reciclado de bicicletas, mecánica general, reparación de smartphones, metalúrgica y electricidad. También se realizan actividades recreativas y deportivas tales como el boxeo, rugby, fútbol callejero.