“Nos preocupa el peligro que corre la gente”, dijo Víctor Cáceres, trabajador de Tren Patagónico y representante de la Unión Ferroviaria en Viedma, a raíz del “deplorable estado de las vías y de las formaciones”.

El referente explicó los motivos que llevaron a que el viernes del fin de semana largo de Carnaval el tren de pasajeros a Bariloche saliera con demora, debido a un medida de fuerza que se resolvió con la presencia de autoridades del Ministerio de Trabajo de la Provincia.

“Fue por los reclamos salariales y por el estado de Tren Patagónico que es deplorable”, afirmó. “Ese día el Tren Patagónico salió con 10 minutos de demora, la idea no era cortar el tren sino que fuéramos escuchados. Esos diez minutos valieron de mucho, intervino la Secretaría de Trabajo y estuvimos acompañados por la CGT”, sostuvo.

Al término del encuentro se labró un acta y el jueves hubo una reunión con autoridades del Tren a las que se le plantearon los distintos temas.

“Para el jueves 17 tenemos otra reunión en secretaría de Trabajo donde se puede concretar algo de lo que estamos pidiendo. La prioridad es el mal estado en el que están los compañeros debido a su bajo sueldo. Ganamos alrededor de 50 ó 52 mil pesos de promedio por 9 horas de trabajo”, se quejó.

Explicó que pertenecen a la Unión Ferroviaria pero admitió que se sienten con poco acompañamiento desde el gremio a nivel central. “Acá hay un solo representante que está en Jacobacci. Yo represento a la Unión Ferroviaria elegido por los compañeros, pero ésta no es una lucha gremial, es de los obreros”, dijo.

Agregó que “los vagones, las locomotoras está todo abandonado. El mantenimiento es lo que se puede hacer acá y en San Antonio, sin repuestos y hasta usamos las herramientas propias para trabajar”.

Luego de la medida “nos llamaron de Buenos Aires de la Unión Ferroviaria dándonos su apoyo. Nos preocupa mucho el estado del tren y el peligro que corre la gente, las vías están deterioradas, está todo muy mal. Estamos en la lucha y esperemos que haya respuestas el 17”, concluyó.