Una pareja de San Antonio logró que se hiciera justicia en su contra una empresa constructora tras una serie de incumplimientos en la compra de una vivienda. El empresario Néstor Fabián Jaramillo, titular de la firma AZ Construcciones, fue condenado a pagar una indemnización de más de 4 millones de pesos, luego de que la justicia considerara que no cumplió con el contrato firmado con los demandantes, quienes habían entregado todos sus ahorros para la adquisición de una vivienda prefabricada que nunca se concretó.

El contrato establecía que la vivienda sería entregada 90 días después de abonar el anticipo y realizar el contrapiso correspondiente. Sin embargo, la obra nunca comenzó, y los representantes de la empresa nunca respondieron a los reclamos de la pareja. Tras múltiples intentos por contactar a la empresa, los demandantes se encontraron con que no recibían información clara sobre el avance de la obra ni sobre su situación en el sistema de cobro. Ante esta situación, dejaron de abonar las cuotas y presentaron una denuncia ante Defensa del Consumidor, aunque no obtuvieron respuestas satisfactorias.

En el fallo, la jueza civil concluyó que la empresa no cumplió con sus obligaciones contractuales y que los demandantes, quienes habían pagado el anticipo y la primera cuota, no recibieron lo prometido. Además, se destacó que el demandado se encuentra detenido con prisión preventiva por otros casos similares, en los que también se le imputa el delito de estafa por la venta de viviendas sin entregar las propiedades. La jueza también señaló que el empresario tiene antecedentes de incumplimientos en diversas causas judiciales, tanto en esta circunscripción judicial como en otras.

En consecuencia, el tribunal condenó a Jaramillo a pagar una suma total de 4.449.785,47 pesos. Esta cantidad incluye 605.321,47 pesos por la devolución del dinero abonado más intereses, 1.422.232 pesos para cada uno de los demandantes por daño moral, y 1.000.000 de pesos en concepto de daño punitivo.