El senador nacional advirtió sobre las consecuencias de la devaluación impulsada por el gobierno de Javier Milei y su impacto directo en la economía de Río Negro

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El senador nacional por Río Negro de Unión por la Patria, Martín Doñate, expresó su preocupación por el impacto de la reciente devaluación impulsada por el Gobierno nacional y aseguró que “las familias y empresas rionegrinas, desde ayer, son al menos un 30% más pobres”. Las declaraciones fueron publicadas en las redes sociales del senador, quien se encuentra analizando con su equipo técnico los efectos inmediatos de las medidas económicas aplicadas esta semana.

Según señaló Doñate, la decisión del Ejecutivo nacional de avanzar con una nueva devaluación, en el contexto de una fuerte retracción de la actividad económica, profundiza el deterioro del poder adquisitivo y afecta de forma directa a sectores productivos clave de la provincia. En esa línea, el senador sostuvo que el encarecimiento de la deuda en dólares del Plan Castello se convertirá en un “yunque para las arcas provinciales”, debido al efecto combinado de la devaluación y la suba de tasas.

Además, el dirigente de Unión por la Patria advirtió sobre la caída de las regalías hidrocarburíferas, que se produce “al ritmo de una crisis global inédita”, y proyectó una caída sostenida en la recaudación tanto a nivel provincial como municipal. “El comercio, la industria, las pymes, autónomos y prestadores de servicios enfrentan una parálisis económica que se profundizará sin pausa. El consumo caerá en picada”, agregó Doñate, en un mensaje dirigido a distintos sectores económicos de la provincia.

En el mismo sentido, el senador alertó que las negociaciones salariales deberán reabrirse de manera urgente para evitar una pérdida aún mayor del salario real, y anticipó que los aumentos tarifarios atados al dólar tendrán un efecto regresivo sobre los sectores de menores ingresos. También afirmó que la demanda social de alimentos y medicamentos “aumentará desde el lunes mismo”.

Doñate contextualizó este panorama dentro del marco de recortes previos implementados por el Ejecutivo nacional que, según indicó, ya generaron un daño significativo a la provincia. Entre ellos mencionó la eliminación de subsidios al transporte público, la suspensión del Fondo Nacional de Incentivo Docente (FONID), los recortes a los subsidios energéticos y la paralización de obras públicas con financiamiento nacional. “No es un simple ajuste: es una crisis profunda que exige responsabilidad y firmeza”, concluyó el legislador.

Las declaraciones del senador se producen en un momento de alta sensibilidad económica y social, en medio de un escenario nacional marcado por la inflación, la devaluación y una política de ajuste que genera tensiones entre el Gobierno nacional y las provincias. Desde distintos sectores rionegrinos coinciden en que las consecuencias de las últimas medidas requieren respuestas inmediatas y coordinadas.