En los Tribunales de General Roca se desarrolló este jueves la audiencia ante el Tribunal de Impugnación en el marco de la causa por el homicidio de Marisa Coliman, ocurrido el 25 de julio de 2023 en Luis Beltrán. La Defensa Penal Pública expuso sus agravios contra la calificación de homicidio agravado por ensañamiento que derivó en la condena a prisión perpetua del imputado.

Cabe recordar que el 12 de septiembre pasado un jurado popular declaró al acusado culpable por unanimidad y que el 29 de octubre el juez de Juicio impuso la pena de prisión perpetua. La impugnación presentada se circunscribió específicamente al agravante aplicado.

Durante su exposición, el defensor penal público sostuvo que la acusación no logró probar los elementos esenciales del ensañamiento durante el debate oral. En ese sentido, afirmó que tanto la fiscalía como la querella habrían asociado la cantidad de heridas con esa figura penal, sin demostrar el dolo específico requerido. También planteó que el hecho que finalmente se tuvo por probado difiere del que fue originalmente imputado.

El representante de la defensa señaló además que no se produjeron pruebas directas sobre el dolor padecido por la víctima, uno de los requisitos del ensañamiento, y cuestionó que el médico del Cuerpo de Investigación Forense no haya sido consultado al respecto, al igual que otros testigos. Por ello, solicitó que se admita el recurso, se readecúe la calificación legal a “homicidio simple” y se remita nuevamente el legajo al juez de Juicio para la determinación de la pena correspondiente.

En respuesta, la representante del Ministerio Público Fiscal rechazó los agravios y remarcó que el jurado fue debidamente instruido sobre el alcance del ensañamiento. Indicó que no existen motivos para presumir una mala interpretación de las instrucciones o de la prueba, y destacó el carácter soberano del veredicto popular, que no resultó contrario a la evidencia producida en el juicio.

La fiscalía sostuvo que el ensañamiento quedó acreditado a partir del desarrollo del hecho: la víctima fue atacada inicialmente en la cama, logró incorporarse e intentó huir para pedir auxilio, lo que dio lugar a una escena dinámica con múltiples desplazamientos dentro de la vivienda. Detalló que se constataron 34 lesiones en dos espacios distintos del domicilio, la mayoría en el cuello, además de heridas defensivas y un tiempo de sobrevida estimado entre 2 y 5 minutos, según el informe forense.

Por estos motivos, el Ministerio Público Fiscal solicitó que se confirme la sentencia condenatoria, al considerar que la prueba rendida permitió al jurado arribar válidamente al veredicto de culpabilidad por homicidio agravado por ensañamiento. La querella, en representación de los hijos de Marisa Coliman, adhirió en todos sus términos a lo expuesto por la fiscalía.

Finalmente, el Tribunal de Impugnación informó que la resolución será dada a conocer dentro de los plazos establecidos por la normativa vigente.