Domínguez respondió a las afirmaciones efectuadas ayer por el ingeniero Nelson Gilardi, de VIARSE, quien aseguró que al menos dos vecinos se dedican a transportar áridos y rompen la ruta que une la villa marítima con la Viedma.
“Puede tener razón. Nosotros hablamos con los vecinos que tienen camiones por este tema”, aseguró el dirigente vecinal.
Manifestó que cruza “diariamente camiones de la empresa Luciano (encargada del pavimento entre El Cóndor y La Lobería) que paran en el medio del camino para bajar el eje porque vienen pasados de kilos” y agregó que “me han dicho incluso que en algunos casos se les ha ‘pisado’ alguna multa”.
“La obra de asfalto va a quedar muy lindo y todo lo que quieran. Pero si no nos ponemos los pantalones largos con el cuidado de la ruta, en diciembre vamos a poder ir a El Cóndor solamente en 4x4”, señaló.
Indicó que el control “no puede estar de 10 a 12” y pidió “un control que esté las 24 horas del día porque solamente así la ruta se va a mantener”.
Dijo que “cuando falta el órgano de control pasan estas cosas, pero si hacemos los controles correspondientes la ruta no se va a romper”.
Luego, coincidió con Gilardi al afirmar que “la ruta está llegando al final de su vida útil” y agregó: “Tenemos que hacer una buena ruta alternativa, porque sabemos que la ruta de la Cuchilla tiene tranqueras con candado y no está en buen estado”.
En este sentido, agregó que sin una ruta alternativa es muy difícil trasladar materiales de construcción. “Si yo tengo que llevar miles de ladrillones al balneario lo tengo que hacer en cinco viajes y el precio se va a las nubes”, aseguró.
25 noviembre 2024
Viedma