Mucho mal ha de estar sucediendo en el “actual estado de las cosas”, para ya consentir desde la política partidaria, el insostenible hecho de envenenar agua para extraer un metal, petróleo o al igual gas no convencional. Un hecho que el sentido común - aquél tan despreciado en aras de la dominación social – no habrá de consentir.
Señores Gobernadores, obren sensatos al devenir del Bien Común: El Agua es de la Vida, y para la Vida. Y no más.
Elvio Mendioroz
LE 8213861
Carmen de Patagones
14 enero 2017
Cartas de Lectores