Iribarren comentó que “en mi caso ingresé a la justicia en 1987, fue secretario, defensor y juez, pero no me arrepiento de ello. Me da lástima haber concluido mi tarea profesional de esta forma. He perdido la fuerza y entusiasmo para poder ejercer la magistratura”. Luego señaló que “nosotros estábamos muy confiados con los abogados. No teníamos estrategia porque queríamos explicar toda y cada una de las decisiones que tomé durante el Triple Crimen. Todo lo que pude aportar lo antes posible, lo hice. Siempre creí en mi trabajo. Como persona que soy y dentro de mi actividad profesional puse lo mejor de mí. No quiere decir que sea perfecto, pero juré siempre respetar la ley. Los errores judiciales deben sanearse en el mismo proceso”.

Sobre el caso del primer Triple Crimen señaló que “este caso se politizó mucho. Esta causa fue un claro ejemplo, siendo utilizado familiares de la víctima hasta el juez. Todo depende de la conveniencia de marcados intereses y no provocar las reacciones de los sectores. Es la consecuencia de tener políticos malos. Aclaró que “en el presente, uno de los motivos de mi renuncia es porque en esta provincia nunca cambiará nada. Pasó con el Juez (Fernando) Bajos en Río Colorado, el primer triple y el segundo triple crimen y de los distintos homicidios. No hay laboratorios, no hay elementos básicos ni tampoco auxiliares que puedan realizar un buen trabajo en la etapa de instrucción. De la boca para afuera es muy fácil criticar”.

Con respecto a su futuro profesional, Iribarren dijo que “ayer mismo presenté la renuncia. Lo hice ni bien terminó la lectura del juicio. Me voy a dedicar al ejercicio de la profesión junto con el Dr. Oscar Pineda y el consultor externo, el Dr Maximiliano Rusconi”.

FUENTE: Radio El Valle