Lo que está sucediendo con la directora de la Escuela 32 de General Roca es, antes que nada, una medida disciplinatoria; no desconocemos el contexto en el cual se produce este atropello a la trabajadora María Elena Salaberry.No podemos dejar de tener en cuenta las denuncias que se llevaron adelante desde la mencionada institución y su comunidad educativa que derivaron en la suspensión del dictado de clases en ese establecimiento y el traslado de l@s alumn@s a diferentes escuelas de esta ciudad. No es casual que en este momento “justo aparezca” esta resolución de la Junta de Disciplina y que desde el gobierno y el gremio oficialista Un.T.E.R.se pasen la pelota con acusaciones mutuas sin decir con la claridad que la realidad está mostrando, que de común acuerdo resuelven disciplinar a quién no responde a ningún color dentro de la interna gremial.
Desde el SITER repudiamos este tipo de prácticas disciplinadoras, no porque los sumarios no sean herramientas válidas, sino por la transformación de esta herramienta de investigación en una de castigo y disciplinamiento.
Livia Barros – Roxana Ramos – Fernando Samuel
SITER - FiskeMenuco
14 enero 2017
Cartas de Lectores