Martín Morales que desde pequeño supo que su pasión era cantar, y así logró - con incesante perseverancia- poder vivir de lo que más le atrae, además se hace un tiempo y lleva adelante acciones para intentar compartir buenos momentos con quienes atraviesan una situación compleja en su salud.
En ese sentido, sin ningún tipo de interés que pueda darle más impulso a su carrera, concurre al Centro Renal de Viedma para acompañar y pasar días amenos con los pacientes que asisten al lugar.
Al respecto, señaló que "tengo una buena relación con el dueño del lugar y se sabe que la música ayuda un poco a alivianar esos dolores".
Entonces contó que "la idea es poder brindar un poquito de alegría a los pacientes que están desde la seis de la mañana".
Más adelante dijo que "tener la posibilidad de venir a cantar es hermoso".
Asimismo afirmó que "no me puedo quejar de nada, tengo muchas oportunidades".
Luego relató que "quiero mucho a los pacientes, me voy encariñando con los pacientes y me duele en el corazón cuando van partiendo".
También indicó que "el doctor que está ahí hace muchas cosas, tiene un gran corazón Carlos Ochoa. Quiere a sus pacientes, los mima, acaricia y les habla".
Además expresó que "él no tiene ninguna necesidad de hacer todo eso. El regalo más lindo que le hace es el amor".

26 diciembre 2025
Viedma