El ambientalista Andrés Di Leo, e integrante de la asamblea no nuclear, se refirió a la posible instalación de la planta atómica en Sierra Grande, como contrapartida al importante nivel de desempleo que existe actualmente en esta localidad.
"Muchos conocemos la historia de Sierra Grande y los despropósitos que se han hecho con el pueblo justamente con la minería del hierro", dijo.
Agregó: "Allí los chinos fueron los últimos capitales que han intervenido en esta mina, y ha sido más de lo mismo, es una historia que se viene repitiendo no solo en Río Negro, sino en todo el país y en países latinoamericanos, excede lo que está pasando en la provincia".
Reiteró: "Se repiten proyectos de desarrollo, que van a traer el trabajo y tarde o temprano terminamos viendo que la realidad es otra, y que los pasivos ambientales son para las generaciones que vienen detrás nuestro, con trabajos por muy corto tiempo y cuando estas empresas dejan de tener rédito, así como aparecen desaparecen".
Cabe recordar que el intendente de Sierra Grande Nelson Iribarren insiste para que sea su ciudad la sede de esta planta, en parte para contrarrestar la falta de una economía estable.
Por el mismo motivo, el gobernador Alberto Weretilneck volvió a la carga y cuestionó a los que se manifiestan en Viedma, asegurando que ellos tienen trabajo estable y bien remunerado,
"Ese es el ejemplo más claro de la minera china en Sierra Grande y con la central nuclear se va a dar trabajo, pero así como se lo dará también desaparecerá", adelantó Di Leo.
"Hay que preguntarse por cuánto tiempo y para quiénes habrá trabajo durante 4, 5 o 10 años de construcción de la planta, y después? ¿qué hacemos? ¿quién va a operar la planta o los tableros nucleares? No seremos nosotros, ni ningún ciudadano de Sierra Grande, sino serán técnicos que vienen del exterior", continuó.
Dijo también: "Hace un mes atrás en Atucha despidieron a más de 1000 obreros, estos son ejemplos recientes de las políticas de este tipo".
"Acá estamos planteando la necesidad de crear trabajo, porque todos necesitamos, pero trabajo genuino que perdure en el tiempo y amigable con el medio ambiente y acorde con las condiciones que como Patagonia tenemos", expresó el ambientalista.
"Creemos que es la tecnología que va en pleno declive, se están cerrando reactores en todo el mundo y cuando esa planta empieza a funcionr, allá por 2030, será una tecnología obsoleta y no se condice para nada con el sello de la Patagonia y de como se conoce la Patagonia en el mundo bueno", finalizó.

22 diciembre 2025
Viedma