Prisión efectiva y tobilleras electrónicas por fraudes al Ipross

Comentar

El Tribunal de Juicio impuso penas de prisión efectiva a cuatro personas condenadas por defraudar a la obra social Ipross mediante la simulación de venta de medicamentos. Los fraudes se llevaron a cabo sistemáticamente entre diciembre de 2013 y abril de 2019.

 

Al finalizar la audiencia de lectura, la fiscalía solicitó la prisión preventiva para los imputados, debido al riesgo de fuga tras conocerse las penas. El Tribunal, aunque coincidió en la necesidad de agravar las medidas cautelares, explicó que al no estar firme la sentencia, se debe aplicar una medida menos severa. Así, se ordenó la colocación inmediata de tobilleras electrónicas para los cuatro condenados, prohibiendo su salida de la ciudad hasta que el fallo sea confirmado por un tribunal superior.

 

Detalles de las penas

 

Por unanimidad, la jueza Laura Pérez y los jueces Oscar Gatti y Luciano Garrido impusieron la pena de 9 años y 6 meses de prisión a Sandra Fasano, auditora del Colegio de Farmacéuticos de Río Negro, culpable de 574 estafas. Fasano recibió la pena más alta al ser coautora de todas las defraudaciones con los demás imputados. Claudio Caffaratti, farmacéutico, fue condenado a 8 años y 6 meses por coautoría en 249 estafas. Rodolfo Eduardo Mastandrea, farmacéutico, recibió 8 años de prisión por 122 estafas, y Raúl Eduardo Mascaró, también farmacéutico, fue condenado a 6 años y 6 meses por 107 estafas.

 

Además de las penas de prisión, los cuatro condenados fueron inhabilitados por 6 años para ejercer su profesión y deberán pagar una multa. Se dispuso la colocación de las tobilleras electrónicas dentro del edificio de Tribunales para asegurar el cumplimiento inmediato de la medida.

 

El delito

 

En marzo pasado, las cuatro personas fueron declaradas penalmente responsables del delito de “estafas reiteradas agravadas por haber sido cometidas en perjuicio de la administración pública”. En 2022, otras dos farmacéuticas de Roca fueron condenadas por los mismos delitos en un juicio abreviado, aceptando su culpabilidad y una pena de tres años de prisión condicional.

 

Las estafas consistieron en simular ventas de medicamentos a afiliados de Ipross, principalmente para enfermedades con cobertura del 100%. Se cargaron, validaron y facturaron medicamentos que los afiliados nunca compraron, aprovechando los sistemas informáticos compartidos por las farmacias de los imputados y el Colegio de Farmacéuticos.

 

Fundamentos del Tribunal

 

El Tribunal valoró la “intensidad” y “persistencia” en el delito durante 6 años, la extensión del daño causado a Ipross y la calidad de la obra social como damnificada. También se destacó el aprovechamiento del conocimiento del sistema por parte de los imputados, la confianza del Colegio de Farmacéuticos, proveedores y afiliados, y el motivo del delito: el lucro desmedido. Se consideraron agravantes como el alto nivel intelectual y educativo de los imputados y el uso de información de sus propios clientes para delinquir.

 

Restricción a la libertad ambulatoria

 

El Tribunal definió una restricción a la libertad ambulatoria para los condenados, evaluando positivamente su comportamiento durante la investigación y destacando su fuerte arraigo en la zona y la presunción de inocencia vigente hasta que la sentencia quede firme. Se ordenó la colocación de tobilleras de seguimiento satelital para garantizar que no abandonen sus localidades mientras tramita el proceso.

 

También te puede interesar...