El Tribunal de Impugnación confirmó las condenas impuestas por el Tribunal de Juicio de Roca contra cuatro farmacéuticos y una auditora del Colegio de Farmacéuticos de la provincia, acusados de defraudar a la obra social Ipross mediante la simulación de ventas de medicamentos a sus afiliados. La sentencia, dictada el lunes pasado, ratifica las penas de prisión efectiva y la inhabilitación para ejercer la profesión en todos los imputados, quienes se encuentran bajo medidas cautelares con tobillera electrónica y restricción de movilidad.
Entre las condenas, se destacan los 9 años y 6 meses de prisión a Sandra Fasano, quien, en su rol de auditora, fue hallada culpable de 574 fraudes. También se confirmaron penas de 8 años y 6 meses para Claudio Caffaratti por 249 estafas, 8 años para Rodolfo Eduardo Mastandrea por 122 delitos, y 6 años y 6 meses para Raúl Eduardo Mascaró por 107 estafas. Además de la prisión, el Tribunal ordenó la inhabilitación de seis años para ejercer como farmacéuticos.
Las defensas presentaron recursos argumentando nulidades en el proceso de allanamiento y cuestionaron la recopilación de evidencia digital. También señalaron que las penas de prisión fueron arbitrariamente altas y solicitaron la absolución, señalando fallas en el sistema de auditoría de Ipross. Sin embargo, el Tribunal de Impugnación desestimó estos argumentos, afirmando que ya habían sido considerados en la instancia previa y que no se demostraron errores en la aplicación de la ley por parte del Tribunal de Juicio.
El Tribunal, encabezado por el juez Adrián Zimmermann, con el apoyo de los jueces Miguel Ángel Cardella y Carlos Mussi, destacó la solidez del fallo original, que consideró "integral y ajustado a derecho". Según el Tribunal, el trabajo del Tribunal de Juicio fue exhaustivo, clasificando y analizando la evidencia de manera que permitió sustentar las condenas. Asimismo, rechazó una propuesta de reparación económica presentada por la defensa de Caffaratti como intento de resolver el caso sin condena penal.
La sentencia también aclaró que las maniobras fraudulentas, que incluían la simulación de ventas de medicamentos a través del sistema informático del Ipross, fueron verificadas a través de pruebas presentadas en el juicio. Según el fallo, las operaciones se realizaron bajo un esquema común en el que cada farmacéutico imputado tenía un rol específico, en coordinación con Fasano.
El Tribunal concluyó que las defensas no lograron refutar los argumentos expuestos en la condena inicial y que su estrategia se limitó a expresar desacuerdos sin fundamentar los alegatos de manera suficiente. La resolución del Tribunal de Impugnación no implica que la condena sea definitiva, ya que las partes aún pueden recurrir a instancias extraordinarias para apelar el fallo.
12 diciembre 2024
Río Negro