Por Osvaldo Mario Nemirovsci*
Las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias
(PASO) en Argentina poseen mecanismos para ser un instrumento de más
democratización en la selección de candidatos dentro de los partidos políticos,
permitiendo a los ciudadanos tener una voz directa en quiénes serán los
representantes en las elecciones generales. Es cierto que en general no se ha
cumplido en forma total esta calidad, pero lo que hay que hacer es perfeccionar
y no eliminar.
El sistema fomenta una mayor transparencia y
competencia interna, lo que a menudo resulta en candidaturas más fuertes y
respaldadas por la base electoral. Después hablan de la “casta” algunos y
de “democracia interna” otros, pero eliminar o suspender las PASO solo conduce
a que adquieran más poder las oligarquías partidarias, ya que se quita una real
posibilidad para que la selección de candidatos en cada espacio político se
realice con marcos de transparencia más firmes y con garantías de
participación.
En un pais con respetos políticos más firmes y en un
tiempo distinto, sería útil que cada partido tenga su propia forma de elegir
candidaturas y armar sus listas y que estas provengan de elecciones internas
límpidas y donde se garantice la participación de quien quiera hacerlo.
Pero, eso no es hoy ni es así, por ejemplo, en el
peronismo donde sí se sacan las PASO, otra vez aparece “lapicera y dedo” para
hacer listas a piacere de quienes mandan.
Tomar el costo económico de las PASO como dato
negativo es olvidar que nunca nos salió tan caro, NO VOTAR, como en el período
1976/83. Para los amantes de los datos dinerarios, sepan que, durante la
dictadura, el gasto electoral fue CERO y el costo de tener un Congreso
funcionando, fue CERO. La vida no es un cálculo contable. Y afirmar que la
“gente” (eufemismo berreta de sociología barata) se cansa por tener que ir a
votar dos o tres veces en un año, es una idea que solo puede anidar en
pensamiento dictatoriales. El ejercicio de las prácticas republicanas, aún en
limitadas expresiones, no cansa.
Hoy las PASO son una forma democrática de mayor
garantía que cualquier interna partidaria sin control externo y ayudan a
ordenar la vida política. En términos de equidad, las PASO garantizan que todos
los partidos, incluso los más pequeños, tengan la oportunidad de presentarse
ante el electorado nacional, lo cual es crucial para la pluralidad democrática.
A pesar de críticas sobre su costo y utilidad en ciertos contextos, el valor de
las PASO radica en su capacidad de hacer más participativo y menos elitista el
proceso de selección de candidatos.
Como dato netamente de oportunidad política sepamos
que la propuesta de eliminar las primarias nace del gobierno nacional. A Milei
les conviene. Al peronismo no. No disfracen, los opositores, voluntades débiles
con argumentaciones falaces para votar junto al oficialismo.
Las PASO, son ordenadoras de espacios internos
partidarios con diversas posiciones, realidad ésta que hoy existe Y MUCHO, en
el peronismo y que no tiene NINGUNA PRESENCIA en el oficialismo que con el
vértice en Milei, verticaliza e impone una única mirada política. Desde ya, que
sería extraño, sospechoso y abriría razonables dudas, que haya diputados
peronistas que voten por la suspensión o eliminación de las PASO.
*Diputado Nacional mc – Río Negro
17 febrero 2025
Opinion