Por Osvaldo Mario Nemirovsci*
Existe un decreto nacional que desregula normas establecidas, o sea que quita valoración regulatoria a cientos de cuestiones, algunas correctas y muchas pesimamente incluidas.
Como por ejemplo la que incluye la “no obligación de contratar guías de turismo para excursiones en los Parques Nacionales.
Con rara argumentación, el presidente de Parques Cristian Larsen, ahora sale a decir que esto permite “simplificar trámites burocráticos” y que “no está prohibida la actividad, sino que se da libertad de elección”. O sea, los guías de turismo, preparados durante años y formados en la defensa de lo natural, de las riquezas del suelo en los Parques y del ambiente, deben esperar a que “el que tenga ganas los contrate y el que no, no”.
Más raro aún es cuando Larsen asegura que de esta forma, “van a ganar trabajo” (textual del funcionario ¡). No se entiende bien como quitando la obligación de contratar guías, éstos profesionales tendrán más trabajo que cuando era imprescindible que formen parte de toda excursión.
Es claro que, en el afán de quitar normas y legislación vigente, el gobierno nacional no mide con igual vara todas las actividades y sus consecuencias. En este caso, la presencia de Guías de turismo, garantizan preservación de las áreas visitadas, y son parte de la seguridad para los visitantes.
Conocemos de sobra, en el sur y en nuestra Patagonia y en nuestro Bariloche, la falta de responsabilidad de muchos turistas que prenden fuego, tiran basura en los lagos, levantan y se llevan como trofeos pedazos de árboles cuya apropiación está prohibida.
Todo esto evitan los guías de turismo.
Ahora las agencias de viaje no están obligadas a contratar guías y podemos apostar que para hacer más competitiva la oferta de excursiones y bajar su costo, muchas dejarán de poner profesionales en las visitas de los turistas a los Parques Nacionales.
Solo en el Parque Nacional Nahuel Huapi hay casi 300 guías matriculados, los cuales hoy temen por su actividad laboral y por sus fuentes legitimas de ingreso. 300 familias hoy están sufriendo la inquietud de no saber si continuarán teniendo sus recursos económicos para vivir.
Todo, por el desconocimiento de funcionarios que no tienen ni idea, ya no de la preservación de los Parques sino de la angustia que provoca, en lo familiar una disposición como ésta.
La prestación turística de calidad requiere que, junto a la belleza natural ofrecida como visualización y visita, haya profesionales que conozcan y cuenten la historia del lugar, sepan sobre flora y fauna y todo lo que relaciona al humano con la naturaleza. Eso hacen, y excelentemente bien, los guías de turismo.
Con esta desregulación, logran la “baratización” del turismo patagónico lo que redunda sin duda en un turismo depredador y descuidado.
Hay 39 Parques Nacionales en nuestro pais. Son miles los trabajadores que hacen de guías y pueden perder su trabajo, y son miles de hectáreas necesarias de cuidado que perderán esa protección.
Es una medida ridícula. Es una medida tomada desde un escritorio porteño.
El presidente de Parques, Larsen, tiene en su cabeza un balance contable que, obviamente, no incluye el cuidado de la naturaleza y mucho menos el trabajo de cientos de personas. Por eso dice que “Con estas modificaciones se procura atraer inversiones privadas para desarrollar el turismo de naturaleza en los Parques Nacionales”, y no cabe duda, que esas inversiones privadas estarán felices de no tener que pagar profesionales del turismo.
Desde organizaciones que nuclean a los guías, han surgido con clara razonabilidad críticas a esta medida ya que apuntan los profesionales a que “Si pensamos en pasajeros libres de visitar parques, sitios y lugares que preservan patrimonios intangibles, especies autóctonas, fauna protegida, y la sola presencia del turista sin la debida conciencia que les hacemos tomar nosotros con nuestra intervención, puede generar basura, incendios, cometer excesos, por el simple hecho de dejarlo librado a su libertad de visitar sin ningún guía”.
Todos los barilochenses y patagónicos debemos acompañar y apoyar a los guías y pedir que se quite esta absurda disposición.
Defender el trabajo de ellos y también el entorno nuestro.
*Diputado Nacional mc – PJ Río Negro
28 enero 2025
Opinion