Se trata de Mariela Rodríguez. Está desocupada desde el 31 de diciembre cuando venció su contrato, pese a sus buenos antecedentes y las recomendaciones de los directivos de la escuela en la que trabajaba.“Lo mío es complicado”, asegura Mariela Rodríguez.

La mujer, madre de un pequeño de siete años, reclama su reincorporación y advierte que sino recibe respuestas favorable se encadenará en la Casa de Gobierno. Cree que se quedó sin trabajo por culpa de una “persecución política” dado que vive en una casa erigida en un terreno que el Municipio reclama como propio, pero que según ella pertenece a un privado.

“Lo mío es complicado. Yo vivo en un predio y la Municipalidad dice que es de ellos. Hace 12 años que vivo ahí. Es un terreno a la orilla del río, junto a la Escuela de Canotaje”, explicó a FM de la Costa.

“Yo trabajé ocho años en negro en la Municipalidad y tengo como comprobarlo. En el 2007 trabajaba por la Ordenanza 314 y el señor Arroyo, que actualmente es legislador, me dejó sin trabajo cuando quedó como intendente interno porque Pedranti fue a la reelección”, continuó detallando.

Señaló que después de esa situación “empezaron a llegar cartas documentos pidiéndome que abandone el terreno. Tanto me molestaron que me dirigí a Tierras en Viedma y ahí me entero que ese predio no es del Municipio, sino que es de un vecino que está al lado”.

“Ellos construyeron ahí y no es de ellos. Así que no se quien es el que está usurpando”, dijo y aseguró que en ese momento Arroyo “me mandó a cortar el agua y la luz”.

Explicó que el 31 de diciembre cayó su contrato con la provincia y dejó de trabajar en la Escuela Técnica 20, donde se desempeñó durante años. “Ellos mismos decían que si nuestro trabajo era sobresaliente podíamos seguir trabajando. Los directivos  me piden, pero no me reincorporaron”, dijo.

“Me dijeron que Lamarque está muy politizada, y es verdad”, señaló, reiterando que “detrás de todo está Arroyo, sino es una casualidad que todo me pase con él desde el 2007”.

“A mi me asesoró un abogado y me dijo que el único que me puede sacar del terreno es el dueño. Yo lo tengo claro esto, pero no voy a salir con mi familia a vivir en la calle”, dijo la mujer.

Mariela se dirigió esta mañana a UPCN. La dirigencia gremial se comunicó con Educación para corroborar sus datos. “Quiero reunirme con el gobernador para comentarle la clase de funcionarios que tiene”, dijo.

“Recibí amenazas para que no venga. Pero yo vine igual, porque esto no da para más. En algún lugar, si no me dan respuestas, me voy a encadenar.  A mi nadie me va a usar. Yo soy negra, pero tengo dignidad”, finalizó.