Edgardo Cancino, secretario adjunto del gremio de la construcción en Viedma, dijo que hubo nuevos despidos en la obra y “la empresa hizo liquidaciones no muy claras”.
Además, el dirigente reclamó porque, tras las cesantías, no se entregó la documentación correspondiente a los trabajadores.
Más allá de estas complicaciones, la demorada obra genera graves consecuencia a la Comarca. Sucede que hasta que no se terminen estas tareas será imposible habilitar nuevas conexiones domiciliarias, a lo que se suma la baja en la presión del fluido que se notará más en pleno invierno.
La obra fue licitada por la Municipalidad de Viedma hace tiempo y debía comenzar a mediados del 2011, pero por problemas de la empresa se inició mucho después. A partir de allí todo fue dificultoso.
Cancino señaló que la cartera laboral provincial clausuró la obra “pero la empresa sigue obligando a la gente a trabajar, casi tomando de rehenes a los compañeros”.
En ese marco, aseguró que inspectores de Trabajo concurrieron al lugar y habrían constatado la situación. “Se pusieron precintos y la empresa no respetó y obligó (a trabajar) los pocos obreros que quedan, bajo la amenaza de echarlos y tomar más gente”, dijo a FM de la Costa.
Explicó que la firma Vertua despidió a 17 obreros de Viedma y otros 27 de Conesa y manifestó que la situación se torna “más complicada” porque “en estos días se terminan los 42 kilómetros y les quedan otros 20 kilómetros para hacer, pero esta empresa tiene problemas de traslado, de comida y no les han pagado a los proveedores”.
“La empresa nunca cumplió con los reclamos y no se hasta donde vamos a llegar con esto”, dijo Cancino quien además se mostró sorprendido porque quien pagó las liquidaciones a los despedidos fue una empleada del Municipio. “Esto es todo muy oscuro”, sentenció.
“Esta obra ya tendría que estar terminada pero la ser esta empresa tan irresponsable estamos en este conflicto”, finalizó.
29 noviembre 2024
Viedma