En la oportunidad, el Mandatario estuvo acompañado por el ministro de Gobierno, Luis Di Giácomo; el secretario General de la Gobernación, Hugo Lastra; el secretario de Seguridad y Justicia, Miguel Bermejo; el jefe de Policía, Ariel Gallinger; el subjefe de la Fuerza, comisario general Roberto Stupniki; y el secretario de Capacitación, Juan José Guidi.
Participaron además el presidente del bloque legislativo del Frente para la Victoria, Pedro Pesatti, la legisladora Susana Diéguez, autoridades provinciales, policiales y público en general.
En este contexto, el Gobernador Weretilneck hizo foco en el contexto histórico de reforma de la Ley Orgánica de la Policía, y a retomar la idea del “consenso” en el diseño del nuevo marco legislativo de la Fuerza Policial Rionegrina.
“Los cambios sin consensos producen reacciones. Y las modificaciones en instituciones con tanta trayectoria e historia, sin la explicación necesaria y sin los consensos, producen reacciones”, sostuvo el gobernador y remarcó la relevancia del acuerdo en la reforma en marcha.
Luego, habló del rol del policía rionegrino de cara al presente y el futuro de las necesidades de la sociedad en materia de seguridad. “A nadie le escapa que este año estamos viviendo cambios en la Policía de Río Negro y que después de 23 años una persona que no es policía es el jefe de la Fuerza. A nadie le escapa cómo estamos cambiando los planes de estudio en los distintos institutos de formación policial. A nadie le escapa cómo hemos modificado la estructura de funcionamiento de la Fuerza, y estamos llevando adelante un proceso de cambio que deje atrás una época”, subrayó Weretilneck en su discurso de cierre.
En ese marco, el gobernador reconoció que los propios oficiales “serán los protagonistas del cambio que hoy está empezando. Con la irrupción de la universidad y de nuevas formas de aprendizaje y estudio, junto con tantos otros cadetes que se están recibiendo este año en los institutos de formación que tiene la Policía está naciendo no una nueva Policía sino una Policía que interpreta y convive con el Río Negro de hoy y fundamentalmente con el Río Negro que viene”.
Seguidamente, el gobernador rescató “la vocación y el espíritu” de los nuevos oficiales. “La que ustedes han tomado no es una decisión cualquiera que se tome por descarte. Ser policía no es una profesión, sino una vocación. Y a las vocaciones se las rescata, valora y jerarquiza”, indicó el primer mandatario rionegrino.
En este sentido, Weretilneck les manifestó a los egresados el reconocimiento y les encomendó impartir “órdenes legítimas”. “La legitimidad sale de la Ley Orgánica, del Reglamento, de la Constitución Provincial y las Leyes que rigen esta Provincia y el país. Y les pido encarecidamente que nunca se olviden de esto, de que vivimos en una Provincia de Derecho y donde los que únicamente imparten la Ley son los jueces elegidos de acuerdo a lo que marca la Constitución”, indicó el gobernador.
Para finalizar, el Gobernador les deseó a los egresados “una fantástica carrera” y los instó a aspirar “a lo más alto, a lo máximo”. “En algunos años los veremos como comisarios, como directores de un instituto de formación policial, como integrantes de la Plana Mayor o como jefes o subjefes de la Policía. Y ese será nuestro mayor orgullo”, concluyó Weretilneck.
Tras la entrega de los diplomas y las plaquetas con menciones especiales, habló el oficial egresado Nicolás Ferraris, en representación del curso. Luego, tomó la palabra el secretario de Capacitación, Juan José Guidi, quien se refirió al proceso de transición y cambio que atravesó la formación policial en el último año.
En este sentido, marcó la incorporación de nuevos parámetros formativos que posibilitaron que los estudiantes tuvieran acceso a internet en la escuela, y que la institución habilitara la externación para que los estudiantes no perdieran el contacto con la comunidad mientras son formados. Además, Guidi destacó el desarrollo de actividades formativas y de vanguardia, como la incorporación de talleres sobre identidad de género y diversidad sexual, violencia de género, conflictos familiares y resolución de crisis.
El sacerdote cristiano Luis García brindó unas palabras a los oficiales egresados y los alentó a permanecer en el marco de la “legalidad y el respeto por las leyes y la sociedad, a estar del lado de la luz y no de la oscuridad”.
21 diciembre 2024
Viedma