El cura aseguró que los cuatro jóvenes en cuestión seguirán alojados en la chacra de la Fundación, cerca de San Javier, pero estarán bajo responsabilidad de la provincia. “Hemos decidido abrirnos a tiempo, antes de quemarnos y gastar energías”, aseguró a FM DE LA COSTA.
Explicó que esta situación se mantendrá hasta febrero. En ese mes está previsto que la Fundación ponga en marcha el plan contención y tratamiento de jóvenes con problemas de adicción.
El padre Luis recordó que todo se inició hace más de tres semanas. “Recibimos una llamada del Ministerio pidiendo un lugar para albergar a los jóvenes porque había problemas y en ese momento les dije que no, porque no podíamos”.
“En otras ocasiones lo hicimos. Incluso he tenido chicos alojados en mi casa. No hemos tenido problema en colaborar con el gobierno anterior o con el actual porque nuestro interés siempre fueron los pibes”, dijo el sacerdote.
Explicó que en el seno de la Fundación se analizó la posibilidad de ubicar a los chicos en las chacras, en el marco del armado del proyecto de tratamiento de adicciones que se pondrá en marcha el año próximo.
Así fue como, tras nuevos hechos de violencia en el hogar Pagano, se recibe a los chicos en las chacras. “Fue una intuición mía, porque quería aportar nuestro granito de arena”, dijo.
“En ese momento había una predisposición total del Ministerio para poner en marcha el centro de adicciones. Pero ya a los tres o cuatro días nos empiezan a derivar a la Delegación de Promoción Familiar”, explicó.
“Comenzamos el trabajo con los pibes y empezamos a ver que desde la propia delegaron se daban limitaciones y retardos en las respuestas”, cuestionó el cura. Explicó que hasta mediados de esta semana el lugar de alojamiento no tenía agua caliente porque el Ministerio no había comprado un calefón que se había pedido.
“Se había prometido una mesa de ping pong y una televisión. Nada se cumplió. Incluso tuvimos que poner a disposición la movilidad propia porque le vehículo de la Delegación estaba roto”, se quejó el padre.
El padre Luis se refirió a los hechos de violencia registrados el lunes en la sede de Promoción Familiar y protagonizados por uno de los cuatro jóvenes bajo programa que agredió a un psicólogo. “Los chicos se ponen nerviosos, porque les prometen una cosa y no se cumple”, manifestó.
El sacerdote explicó que durante el fin de semana “los chicos tenían un comportamiento ejemplar” y señaló que “uno de los chicos dijo el lunes que necesitaba ir a la Delegación a ver a su mamá que estaba haciendo un trámite y no fue así, era para golpear a este hombre”.
En ese momento, dijo que “desde la propia Delegación pusieron el grito en el cielo por lo ocurrido cuando en realidad nosotros estábamos haciendo una tarea que le correspondía a ellos. Nosotros no tenemos que andar llevando los chicos a todos lados, al médico, a la casa, a la justicia”. Además, señaló que los acompañantes de los chicos “no se que hicieron, no estaban”
“En ese momento, notamos mucho retroceso, muchas cosas de fondo, cosas oscuras y manos negras. Nosotros no estamos para sufrir sobre nuestras espaldas los problemas enquistados del Ministerio”, reclamó.
Dijo que el ministerio “debe solucionar estos problemas internos para hacer un trabajo en conjunto con las organizaciones” porque “estos programas nunca van a salir adelante si no se hace un análisis profundo”.
“Es necesario saber si estas personas que participan de estos programas están realmente capacitadas y preparadas para la tarea, o si son punteros políticos que fueron puestos allí. Eso es algo que debe dirimir el gobierno”, dijo.
Explicó que los chicos siguen en la chacra pero “el programa ahora depende de Promoción Familiar hasta febrero” y aclaró que “les alquilaremos el lugar pero sin cobrar”.
“Hay cuestiones muy preocupantes de lo que pasa en el Ministerio. Mucha gente me ha advertido que hay intereses personales y de grupo en este espacio y por eso hemos decidido abrirnos a tiempo, antes de quemarnos y gastar energías”, dijo.
Incluso, señaló que “estoy poniendo demasiado el cuerpo, si hasta puse en juego mi riñón recién transplantado”.
El apoyo del ARI Viedma
En tanto, a través de un comunicado de prensa la Mesa Local del ARI brindó su total apoyo a la decisión tomada por el padre Luis.
"Después de los vaivenes políticos del gobierno y la falta de compromiso, el ministerio debe solucionar los problemas internos para hacer un trabajo en conjunto con las organizaciones, entendemos y a su ves, apoyamos con mucho dolor que se haya tenido que disolver el convenio con el Ministerio de Desarrollo Social para atender a los jóvenes en conflicto con la ley, que hasta hace unos días estaban en el ex Hogar Pagano", dijeron.
"Lo que hoy sucede en nuestra provincia y el gran vacío que hay en la problemática para jóvenes en situación de riesgo es lamentable, ya que estas cuestiones la tendría que asumir el Estado. Es mas que evidente que hay cosas que no están claras, que no permiten avanzar en el abordaje serio y comprometido de la problemática, siendo hoy una de las mas importantes que afecta a nuestro niños, niñas y adolescentes en el desarrollo de sus capacidades y pone en permanente riesgo la integridad de los jóvenes y la familia", agregaron.
Señalaron que "si a esto le sumamos la falta de compromiso en el trabajo diario y serio para con ellos, lo único que se logra es el malestar, la desilusión y el fracaso de todo tipo de abordaje a la situación de vulnerabilidad".
"Es el Estado es quien debe proporcionar los mecanismos necesarios para resguardar la integridad de ellos y mas en los tiempos que vivimos, sabemos que las drogas están en las calles de nuestra provincia, que hay un consumo masivo y que cada ves son niños de temprana edad los que ingresan a este mundo de las drogas, niños y niñas que entre los 13 y 17 años comienzan a consumir y es la edad en que oscila el inicio del consumo, con un predominio por parte de los varones, como vemos es una problemática ya instalada sobre la que debemos trabajar en prevención y en un tratamiento oportuno para esos niños, niñas y adolescentes . La situación de muchos de los niños y jóvenes rionegrinos precisa una urgente y real atención, que necesariamente debe ser integral, es decir, el caso particular y todo su entorno, incluida su familia", finalizaron.
21 diciembre 2024
Viedma